La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha presentado este miércoles su candidatura para liderar el PSOE de Andalucía en un acto cargado de polémica. Durante su intervención, Montero lanzó graves acusaciones contra el Partido Popular, asegurando que su formación intentó desalojar a los gobiernos socialistas en Andalucía mediante una campaña de "noticias falsas". En su discurso, Montero vinculó la pérdida del PSOE de la Junta andaluza con lo que consideró una estrategia mediática orquestada por los populares para dañar la imagen de los socialistas.
Montero, conocida por su cercanía al presidente Pedro Sánchez, aseguró que los populares difundieron "noticias falsas" que, a su juicio, contribuyeron al desgaste del PSOE en la región, añadiendo además que se habían valido de "fallos judiciales" para infligir daño a los socialistas. En un claro guiño a la sentencia de la trama de los ERE, Montero insinuó que los socialistas fueron injustamente atacados, afirmando que "los presidentes de la Junta pasaron décadas de sufrimiento" tratando de demostrar la "honestidad" del partido.
Además, la ministra presentó una serie de "últimas estadísticas", cuyas veracidad fue puesta en duda por varios expertos, para respaldar sus afirmaciones y defender su candidatura al frente del PSOE andaluz. Los datos, que no fueron detallados ni contrastados en su totalidad, fueron interpretados por algunos sectores como una estrategia para desviar la atención de los problemas internos del partido y de los recientes fracasos electorales del socialismo en Andalucía.