
El registro que ha llevado a cabo la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en la vivienda del exministro socialista José Luis Ábalos este mismo martes no habría sido casualidad ni fruto de una búsqueda rutinaria; sino que este habría sido ordenado por el magistrado del Tribunal Supremo Leopoldo Puente después haber escuchado unas grabaciones de audio requisadas en el móvil del exasesor del también secretario de Organización socialista, Koldo García Izaguirre, en las que el propio Ábalos reconocería haber cobrado mordidas por la adjudicación de obras públicas dependiente del Ministerio de Transportes a dedo.
En concreto, Ábalos habría admitido haber recibido un "beneficio económico" por dar contratos de su cartera a empresas determinadas, según consta en un auto al que ha tenido acceso Europa Press. En este, se especifica que el exsecretario de Organización del PSOE "pudiera haber participado, puesto de acuerdo con terceros desde su condición de titular del Ministerio de Transportes, en la adjudicación de determinadas obras en favor de concretas empresas a cambio de un precio o compensación económica".
De hecho, este mismo informe explica que determinadas obras públicas podrían haber sido adjudicadas "indebidamente" con la colaboración del por entonces número dos de Pedro Sánchez. Por ello, el el juez del Supremo considera que existen "elementos bastantes" para considerar que estas adjudicaciones se habrían realizado por el pago de mordidas que Ábalos admitiría en conversaciones con Koldo que este habría grabado.
La solidez de los indicios
"A partir de la solidez de los mencionados indicios, la entrada y registro que aquí se acuerda resulta de la efectiva existencia de aquellos, que permiten considerar, al menos, la posible comisión de sendos delitos de cohecho y pertenencia a organización criminal", explica el magistrado para justificar el registro de la vivienda de Ábalos, que ha durado cerca de diez horas y tras el que los agentes de la UCO han clonado su teléfono móvil.
De la misma forma, mantiene que la medida es "proporcionada" por la gravedad de los hechos que se le imputan en esta causa; cuyas diligencias fueron abiertas tras las acusaciones del nexo corruptor de la trama Koldo, Víctor de Aldama; quien afirmó en el Supremo haber pagado comisiones a altos cargos del Ministerio de Transportes a cambio de la concesión de obras públicas a determinadas empresas de construcción.
Aún así, Ábalos se ha mostrado tranquilo en declaraciones a los medios de comunicación tras el registro asegurando que "el trato –de la UCO-- ha sido excelente y de absoluta colaboración" explicando que "lo único que les interesaba era el teléfono", el cual ha sido clonado, por lo que ya lo tiene de nuevo en su propiedad. Además, según ha dicho, le han sido requisadas dos memorias que los agentes no han podido clonar por falta de tiempo pero que podrá recuperar a partir de este miércoles.