La UCO requisa cajas, maletas y maletines en la casa de Ábalos de Valencia

Casi diez horas habría durado el registro de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en la vivienda que el exministro de Transportes y exsecretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, tiene en propiedad al 100% en Valencia y en la que actualmente reside. Un tiempo en el que los agentes del cuerpo policial han requisado al diputado del Grupo Mixto cajas, maletas y maletines que podrían portar pruebas sobre su implicación en los supuestos casos de corrupción vinculados a la trama Koldo y por los que se encuentra imputado.

Alrededor de las 16:30 horas ha finalizado el registro que ha comenzado a las 7:00 horas de la mañana después de que el magistrado del Tribunal Supremo Leopoldo Puente lo haya ordenado para conocer documentos que puedan ser pruebas de los delitos que habría cometido Ábalos. Así, según han informado fuentes jurídicas a EFE, la UCO le ha clonado varios de sus dispositivos; entre ellos su teléfono móvil, para realizar un volcado con todo lo que contiene.

Tras el registro, los agentes han depositado los objetos aprehendidos introduciéndolos en distintos vehículos antes de abandonar el lugar. Posteriormente, la abogada del exnúmero dos de los socialistas ha salido del edificio sin ofrecer declaraciones a los medios de comunicación que se encontraban a las inmediaciones de la vivienda.

La adjudicación de obras, en el foco

De esta forma ha concluido el primer registro de los agentes en la propiedad de Ábalos, en el que la UCO esperaba encontrar documentación que involucrase al exministro en adjudicaciones de contratos de obra civil, unas diligencias que se enmarcan en una pieza secreta de la investigación que dirige el magistrado Leopoldo Puente. Algo a lo que Ábalos fue vinculado después de una de las declaraciones del conseguidor de la trama Koldo, Víctor de Aldama, que habría apuntado a pagos de comisiones a altos cargos de su Ministerio por la adjudicación de obras a dedo; algo por lo que salió de prisión preventiva tras haber colaborado con la Justicia.

Además, los agentes han requerido documentación al exministro sobre diferentes empresas con las que podría estar vinculado. Una de estas organizaciones sería la Fundación Fiadelso, que oficialmente tiene el objetico de apoyar al desarrollo local y social de Perú y con la que el exministro tendría una cercana relación.

Cabe destacar que Ábalos se encuentra investigado en el alto tribunal por presuntos delitos de organización criminal, tráfico de influencias o cohecho en la causa que comenzó en torno a supuestas comisiones en contratos de mascarillas en plena pandemia, pero que se extiende también a las mencionadas irregularidades en otras adjudicaciones públicas que se habrían cometido bajo su mando.

"Les interesa el teléfono"

Posteriormente, el exministro ha salido a atender a los medios de comunicación para aclarar que "el trato ha sido excelente y de absoluta colaboración" durante el registro y explicar que "lo único que les interesaba era el teléfono", el cual ha sido clonado, por lo que ya lo tiene de nuevo en su propiedad. Además, según ha dicho, le han sido requisadas dos memorias que los agentes no han podido clonar por falta de tiempo pero que podrá recuperar a partir de este miércoles.

En este marco, ha defendido que se han llevado pocos objetos pero que parecían más porque estos eran empaquetados cada uno en una caja diferente por protocolo. Respecto al contenido de la información clonada, ha asegurado estar tranquilo; ya que "aparte de lo personal" no hay mucha información que aportar porque, según ha dicho, "lo demás está todo claro". "Mi teléfono no registra una gran actividad desde hace mucho tiempo", ha zanjado.

Un movimiento extraño de cajas

En otro orden de cosas, una de las periodistas le ha interrogado sobre si unos movimientos de cajas que habrían tenido lugar los días anteriores –de los que había sido informada por vecinos— tendrían algo que ver con el registro de este martes. En torno a esta cuestión, Ábalos ha lanzado una carcajada antes de asegurar que este movimiento de cajas al que se referían los vecinos se debía a que su exmujer había vendido su casa y le estaba devolviendo algunos de los elementos propiedad de Ábalos, que serían libros en su mayoría.

En este contexto, Ábalos se ha justificado en el registro para no asistir al pleno del Congreso como una "causa de fuerza mayor", ya que tendría que estar a disposición de los agentes; que han sido los que le han llamado a su teléfono móvil esta mañana porque no lo localizaban, de forma que este les habría abierto de forma cordial.

Una "reputación destrozada"

Por otra parte, Ábalos ha lamentado que, según él, haya "en este proceso más sospechas que indicios"; aunque se ha mostrado con fuerzas para seguir defendiendo su inocencia "hasta el final" esperando que "esta pesadilla termine algún día". "Lamentablemente la condena ya la tengo: la condena social, el juicio paralelo, la reputación destrozada y muchas vidas destrozadas", ha sentenciado el exnúmero dos de Pedro Sánchez.