
Primero fue la abrupta salida de Podemos del grupo parlamentario de Sumar, liderado por Yolanda Díaz a pocos meses de arrancar la legislatura. Después, la expulsión del exministro y exsecretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, por su vinculación con el caso Koldo. Ahora, la diputada de Compromís, Águeda Micó, abandona también su grupo para "tener las manos libres" y poder fiscalizar a un Gobierno cada vez más cuestionado por la corrupción.
Un total de siete diputados, actualmente seis, tras la retirada de Lilith Verstrynge de la política, han acabado en el Grupo Mixto, siendo el que más ha crecido en solo dos años de legislatura en toda la historia democrática. A ellos se suman los miembros que ya formaban parte del grupo desde el inicio: Alberto Catalán de UPN, Cristina Valido de Coalición Canaria y Néstor Rego del BNG.
Aunque no sea el Grupo Mixto más numeroso de la historia, como aquel de la III Legislatura (1986–1989), que llegó a reunir 51 diputados, o el de la XIII Legislatura, con 18 miembros, nunca antes se había visto sometido a tres modificaciones internas en apenas dos años. Ahora, con la incorporación de la diputada de Compromís, el grupo se ve obligado a rehacer de nuevo su acuerdo interno, que regula los turnos de palabra, las portavocías y la representación en comisiones. Será la segunda reconfiguración del grupo ya que según fuentes consultadas por Libertad Digital ni siquiera se actualizó el acuerdo con la entrada de José Luis Ábalos, cuya actividad parlamentaria es inexistente desde que fue salpicado por el caso Koldo.
La salida de Águeda Micó de Sumar y su paso al Grupo Mixto supone un nuevo golpe político para el Gobierno, que se ve obligado a negociar directamente con la diputada valenciana si pretende conservar su apoyo en futuras votaciones y evitar que su debilidad parlamentaria quede aún más expuesta.
Desde el Grupo Mixto reciben con buena disposición a Águeda Micó, aunque su incorporación no será oficial hasta que la Ejecutiva de Compromís lo confirme formalmente. Su salida de Sumar se produce tras los casos de corrupción que cercan al PSOE y tras el rechazo del socio minoritario del Gobierno a que Pedro Sánchez compareciera en la comisión de investigación sobre la gestión de la DANA.
El cambio de grupo abre ahora una incógnita ya que Micó ejercía como vocal de Sumar en esa misma comisión. El diputado de Podemos, Javier Sánchez Serna, figura actualmente como integrante de la comisión de investigación de la DANA en representación del Grupo Mixto, por lo que ahora deberá abrirse una negociación interna para decidir si mantiene esa plaza o si esta pasa a manos de la diputada valenciana Águeda Micó.

