La paciencia de Rajoy, y la de los españoles...++

Dice el presidente del gobierno que sabe a dónde va y pide paciencia. Es el colmo. Poco
importa a dónde crea que va este señor, cuando España sí sabe a dónde va.

Hace unos días unas personas fueron a las barricadas en Madrid. Todos los medios sin
excepción, incluído éste en el que escribo criticaron tal acto para luego hablar de su
fracaso. Yo no creo que reunir a mil personas cuando se les ha dicho que se va a usar la
violencia, con lo que eso implica sea un fracaso. De hecho creo que es un éxito.

Adolf Hitler la primera vez que se manifestó fueron cuatro y casi los matan. Ocho años
más tarde gobernaba Alemania. Malo me lo fías sergeidu, dirán ustedes. Sí. Malo. Es lo
que aventuro que le pasa a este medio. Que quisieran que esa fuerza proviniese de
otras gentes, liberales en vez de izquierdistas. Pero es lo que hay.

Peor leí artículos que se preguntaban si tales concentraciones eran democráticas y
ponían en valor el voto. Menuda indigencia intelectual la de esos autores. ¿Es legítimo
presentarse a las urnas con un programa y variarlo por completo nada más poner el pìe
en el poder?. Vaya estafa y vaya estafador es el que lo hace. La realidad obliga y hay
que tener paciencia. NO. Eso es mentira y usted es un mentiroso, lo digo bien alto.

Usted protege al poder, al funcionario y a la banca. Es lo que ha hecho y se le acaba el
tiempo. No pida paciencia que bastante se le ha dado.

En este mismo foro vivimos acalorados debates antiZP tras el congreso de Valencia
sobre el valor de la ideología de Rajoy y la estrategia. Ahora sabemos lo que hay.

Un conjunto de ministrillos pseudofuncionarios que no valen para nada y un presidente
hueco. Para eso prefería a las mujeres de ZP. Al menos tenían ideología; jamás estuve
de acuerdo con ella, pero la tenían. Éste señor que está ahora solo puede pedir
paciencia porque nunca a fiado nada a un proyecto ideológico.

No hay paciencia. Dijiste economía. Hay más paro. Vete, sobras.

Lo cierto es que no se trata de equivocaciones. No es que Montoro o De Guindos vayan
por una senda sabiendo lo que hacen. Es que son inútiles. Como su jefe.
Desmitifiquemos. Son tan tontos como lo era la del matrimonio gay.

¿Y qué queda?. Mucha esperanza, sin duda. Asumido el fracaso del proyecto y sin
altyernativa alguna al mismo, es el sistema entero el que debe perecer. Alégrate
español. Otro tiempo viene y esa es tu paciencia.

Sí, ten paciencia porque los que ves ahora van a caer. Esa es tu paciencia. Caer para no
volver.