12 lugares singulares de España que parecen de otro planeta
España tiene rincones por toda su geografía que parecen sacados de otro mundo. De hecho parece que en cualquier momento subiremos a una nave espacial, pulsamos el botón «lugares increíbles» y nos dejamos llevar para conocer parajes que parecen sacados de otro planeta.
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Charco de los Clicos (Lanzarote)
Contrastan el color negro de la arena volcánica, el azul del Océano y el color verde de la laguna, efecto producido por la presencia de algas ruppia marítima. Sin duda uno de los rincones para no perderser en Lanzarote.
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Parque natural de Río Tinto (Huelva)
Tradicionalmente ha sido una zona de extracción minera y ahora es visitado todos los años por cientos de turistas. Durante el último tercio del siglo XIX, en 1873, un grupo de empresarios británicos adquirió para su explotación las Minas de Ríotinto. Lo que vemos es el efecto del hierro disuelto en el río.
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Montaña de Sal (Cardona)
Desde el principio de los tiempos ha sido tratada como una fuente de riqueza, primero por la sal y ahora por su explotación turística. En Cardona, provincia de Barcelona, se encuentra la Montaña de Sal. Fue una fuente de riqueza excepcional para romanos, musulmanes y cristianos. El castillo de Cardona da fe de ello y tanto este como la cueva de la sal están abiertos al público.
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Cuevas del Drach (Mallorca)
Un verdadero viaje al centro de la Tierra nos revela algunos encantos de Mallorca. Situadas en Porto Cristo, las cuevas del Drach se extienden por 2.400 m y se sumergen a más de 20 metros bajo tierra.
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Bardenas Reales (Navarra)
Las Bardenas Reales son un espacio natural y protegido del Reino de Navarra. Parece un desierto, pero alberga todo un ecosistema de vida y hasta se cuenta entre las Zonas de Especial Protección para las Aves y la lista de Reservas de la Biosfera de la Unesco. Si quieres viajar este verano al interior, Navarra es una opción ideal.
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Gruta de las Maravillas (Huelva)
La gruta de las Maravillas se encuentra en la localidad de Aracena (Huelva). Se extiende a lo largo de 2 km y es la primera cueva turística de España (1914). Igual que las de Mallorca, es una retrospección hacia el centro de la Tierra.
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Can Marçà (Ibiza)
La fluoresceína del lago de los Deseos produce este efecto en la cueva de Can Marçà. Es un efecto buscado artificialmente pero igualmente causa impresión. El lugar se encuentra en el Port de Sant Miquel Balansant, Ibiza, y puedes llegar durante tu vuelta a Ibiza en bici.
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Torcal de Antequera (Málaga)
El Torcal de Antequera (Málaga) es uno de los mejores paisajes kársticos de Europa y precisamente es esta característica la que ha posibilitado que los elementos (agua, viento) moldeen las rocas y nos den este curioso paisaje como resultado.
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Paisaje lunar del PN Corona Forestal (Tenerife)
La Corona Forestal es el mayor espacio protegido de Tenerife con más de 46.500 hectáreas. Entre la exuberante vegetación de los bosques llama la atención este espacio, el paisaje lunar de la Corona Forestal.
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Bufones de pría (Asturias)
El agua penetra con violencia entre las grietas del acantilado y caracteriza este paisaje asturiano, conocido como los bufones de Pría. El propio oleaje ha ido erosionando la roca y configurando las “chimeneas”. Algunos impactos pueden elevarse hasta 20 metros de altura. De hecho, esta es una de las zonas donde más cosas raras ocurren entre el mar y la tierra. Si se quieren acercar a verlos hay que hacerlo con precaución.
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Géiser en el Parque Nacional de Timanfaya (Lanzarote)
El Parque Nacional de Timanfaya cuenta con un paisaje deslumbrante, casi lunar, colores intensos, volcanes inactivos y, una de las cosas que más llama la atención a la mayoría de los turistas, la posibilidad de contemplar la demostración de un géiser. Un simple vaso de agua introducido en un agujero del suelo basta para que, en pocos segundos, salga un tremendo chorro de vapor de agua, un auténtico géiser.
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Charco Azul (El Hierro)
De un lago subterráneo mágico pasamos a una encantadora piscina natural: el Charco Azul. Este se encuentra en la Isla del Hierro, en Canarias. El Charco Azul está enclavado en una roca y rodeado de un paisaje sublime, así pues sus aguas cristalinas no serán la única razón por la que acudas a este lugar de cuento. Y contra todo pronóstico, se puede acceder fácilmente a pie.
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