A pesar del tono positivo del intercambio, Donald Trump ha advertido que este contacto "no conducirá a una paz inmediata", lo que sugiere que las posiciones entre ambas potencias siguen alejadas en lo relativo al fin de la guerra.
El diálogo entre ambos líderes se produce en un momento de creciente presión internacional para avanzar hacia una solución negociada al conflicto.

