La tormenta Hans ha azotado parte de Escandinavia y el Báltico durante varios días, causando el desbordamiento de los ríos, dañando las carreteras e hiriendo a numerosas personas. Las fuertes lluvias han provocado deslizamientos de tierra en el sur montañoso de Noruega, y la policía ha desalojado a más de 600 personas fueron en la región norte de Oslo. La corriente es tan fuerte que ha arrancado una casa de sus cimientos y la ha arrastrado río abajo, impactando contra un puente, aunque no ha habido heridos.
