Occidente está presenciando un cambio de paradigma político no visto en mucho tiempo que ha puesto en jaque a toda la izquierda. El terremoto no es menor. La mala gestión y los diferentes escándalos de los partidos izquierdistas se ha llevado consigo más de cinco presidentes. Ahora, Pedro Sánchez y el primer ministro británico, Keir Starmer, ven peligrar seriamente sus puestos.
Entre los presidentes de izquierda caídos recientemente, los más destacados son el expresidente de Estados Unidos Joe Biden, el alemán Olaf Scholz, el argentino Alberto Fernández y el canadiense Justin Trudeau, el último en dimitir. Otros presidentes de menor calibre, como Antonio Costa en Portugal y las presidentas de Finlandia y Nueva Zelanda, también han sido derrocadas.
Efecto Trump y Milei
Conviene reparar en que la grave crisis que sufre la izquierda viene derivada por diferentes motivos. Entrando en detalle, hay que subrayar el giro político de Estados Unidos y Argentina. Tanto el presidente electo, Donald Trump como el argentino, Javier Milei, han conseguido acceder al poder tras la mala gestión de Biden y del peronismo. Biden y su sucesora, Kamala Harris, del Partido Demócrata, perdieron las elecciones americanas principalmente por la política Woke y la gestión pésima en política exterior en Ucrania, Afganistán y Oriente Medio. Por otro lado, los argentinos apostaron por Milei para derrotar la corrupción del Kirchnerismo, que ha campado a sus anchas durante décadas en el país.
Por su parte, Canadá ha sufrido unas políticas liberticidas por parte de Justin Trudeau, quien se ha visto obligado a dimitir como primer ministro. En Alemania, Olaf Scholz ha convocado elecciones tras sus fallidas políticas climáticas, que han puesto en peligro al sector automovilístico, y la crisis migratoria que enfrenta el país germano, que ha provocado el ascenso de AFD, el Vox alemán, cuyo crecimiento en las encuestas no cesa.
Sánchez y Starmer con el agua al cuello
Con todo esto sobre la mesa, tanto Pedro Sánchez como Keir Starmer se aferran al cargo con uñas y dientes tras verse envueltos en escándalos de gran magnitud. Sánchez, su familia y medio gobierno están cercados por la corrupción de la trama de Aldama, por lo que este 2025 va a ser una pesadilla para el Ejecutivo español, que además no tiene mayoría en el Congreso.
En cuanto al primer ministro del Reino Unido, ha sido acusado de ocultar la violación de 1.400 niñas británicas por parte de los musulmanes cuando ejercía como fiscal. Elon Musk se ha hecho eco de estas informaciones y pide en sus redes sociales prisión para el mandatario.