
Elon Musk ha encendido de nuevo la polémica. El multimillonario y dueño de Tesla y X (antes Twitter) pidió a sus más de 227 millones de seguidores que cancelaran sus suscripciones a Netflix, acusando a la plataforma de introducir una "agenda trans" en sus contenidos. El mensaje, acompañado de un meme del caballo de Troya, se viralizó en cuestión de horas y superó el millón de interacciones.
La publicación no se quedó en un simple gesto simbólico. Miles de usuarios compartieron capturas en redes sociales mostrando que habían dado de baja su cuenta, y las acciones de Netflix cayeron un 2% tras la viralización del mensaje. La capacidad de Musk para influir en el mercado y en la conversación digital volvió a quedar en evidencia.
Cancel Netflix for the health of your kids https://t.co/uPcGiURaCp
— Elon Musk (@elonmusk) October 1, 2025
Viejas disputas de Musk con Netflix
No es la primera vez que Elon Musk carga contra Netflix. En 2022 ya había asegurado que el "virus woke" estaba arruinando la calidad de su catálogo, mientras que en 2023 declaró en una entrevista que el "virus mental woke" era "el fin de la civilización". Esta vez, sus críticas estallaron tras los comentarios atribuidos al creador de la serie animada Dead End: Paranormal Park, Hamish Steele, que supuestamente se burló del comentarista conservador Charlie Kirk tras su fallecimiento.
Cancel Netflix https://t.co/C0cPhbnaB4
— Elon Musk (@elonmusk) October 2, 2025
Con una fortuna estimada por Forbes en 499.000 millones de dólares, Elon Musk combina poder económico con un altavoz digital sin precedentes. Cada una de sus intervenciones sacude tanto a los mercados como a la opinión pública. Esta última campaña contra Netflix ha abierto un nuevo frente en el debate cultural sobre la representación de la diversidad en las plataformas de streaming, y pone a Musk en el centro de la discusión sobre hasta dónde llega la influencia de un empresario en la cultura popular.

