
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, se ha pronunciado sobre el futuro de las nucleares en España tras conocerse que las tres propietarias de Almaraz han pedido al Gobierno una prórroga de tres años. Mientras llega la solicitud formal, Galán ha reiterado que "son seguras y necesarias" y se necesitan "para evitar posibles apagones" y "problemas que puedan afectar al servicio". En una conferencia con analistas para presentar los resultados de los primeros nueve meses del año, ha insistido en que la central "podría funcionar hasta 2030, sin tener que pedir ninguna licencia" extra, en alusión a que la documentación para la última prórroga se refería al periodo 2020-2030.
Además, Galán ha resaltado algo "que tiene muchísima importancia", en alusión a la movilización de la zona en contra del cierre. "La sociedad civil está pidiendo que se mantengan en funcionamiento por la responsabilidad social y porque se necesita para mantener las luces encendidas en nuestro país". Tras el movimiento de las tres compañías, que llega tras meses de incertidumbre, el presidente de Iberdrola ha señalado que la central ahora "depende únicamente de la decisión del Gobierno": "Ellos tendrán que tomar la decisión y explicarán las consecuencias".
A preguntas de los analistas, Sánchez Galán también se ha pronunciado sobre las consecuencias del apagón para la empresa y las responsabilidades de lo ocurrido en medio de unas acusaciones cruzadas que continúan. El presidente de Iberdrola ha cifrado en 180 millones el impacto del incremento de "los costes de servicios auxiliares" por el funcionamiento "reforzado" de la red, con más energía convencional y que aún no han podido trasladar a los clientes.
En cuanto a su origen, el presidente de Iberdrola ha insistido en que fue "la falta de energía síncrona", en alusión a nuclear, gas e hidroeléctrica y la altísima penetración de eólica y sobre todo fotovoltaica el 28 de abril. "A medida que entran más renovables, el suministro se torna variable y precisa de más energía síncrona", ha dicho recalcando que tras lo ocurrido Red eléctrica "ha modificado la operación" y trabaja con más tecnologías síncronas.

