
Este viernes ha sido publicado el dato del Índice de Precios de Consumo (IPC) del mes de noviembre en el INE y si algo podemos decir es que el año 2025 va a terminar de la misma forma que empezó, es decir, con un coste de vida más alto. Si hay bienes o servicios que se han disparado en los últimos meses, como es el caso de la recogida de basuras que se ha encarecido más de un 30%, con los últimos datos podemos ver que los alimentos también han experimentado una creciente subida a lo largo del año, incluyendo los alimentos más básicos.
A pesar de que el Gobierno se vanagloria de que España es la locomotora de Europa y que "estamos mejor que nunca", la realidad es que las familias han visto cómo llenar la cesta de la compra cada vez se vuelve más complicado. Y no es para menos, tan sólo hay que observar la evolución de los precios de los alimentos entre noviembre del año pasado y noviembre de este año.

Como podemos ver en el gráfico, si hay un producto que se ha vuelto tremendamente caro con respecto al precio que tenía hace justo un año es el caso de los huevos, que han experimentado una subida del 30,2%. No obstante, no es el único alimento que ha tenido una subida tan acusada, ya que el precio de la carne de vacuno también ha crecido un 18%, el de la carne de ave un 4,2%, el precio del pescado fresco o refrigerado ha subido un 7,8%, el pescado congelado un 6,3%, etc. También otros alimentos como el chocolate (+14,5%), la mantequilla (+5,5%), la leche (+5,4%) o el queso (4,4%) han subido de precio.
La subida del precio de los huevos tiene más importancia de la que pueda parecer a simple vista, ya que hace poco contamos en este artículo como, entre 2018 y 2025, los españoles habían empezado a consumir más huevos o carne de pollo en detrimento de otros alimentos como la carne de vacuno, la carne en general o el pescado. En concreto, contando los siete primeros meses de 2018 y de 2025, el español promedio había pasado de consumir 4,97 kg de huevos a 5,38 kg, y en cuanto al consumo de carne de ave el cambio fue de 7,44 kg en promedio a 7,63 kg.
Si los ciudadanos ya habían dejado de consumir otros alimentos como carne de vacuno, pescado fresco, aceite de oliva, etc., porque estos se habían vuelto más caros y por eso se pasaron a los huevos y a la carne de pollo, ahora estos mismos consumidores se encuentran entre la espada y la pared con la subida tan vertiginosa de los huevos y también con la subida de un 4,2% de la carne de pollo. A lo que hay que sumar que en Navidad estos productos suelen subir de precio.
En definitiva, los datos del mes de noviembre del INE confirman algo que se ha ido viendo a lo largo del año, y es que a los españoles cada vez les sale más caro comprar alimentos básicos como la carne, el pescado o los huevos. La "potencia económica" de la que presume Pedro Sánchez se sigue chocando con la realidad que viven las familias.


