
Un mes después de ordenar su cierre por carecer de licencia, el Ayuntamiento de Madrid ha concedido finalmente la licencia de actividad al hostal de Parque de las Avenidas. La decisión ha caído como un jarro de agua fría entre los vecinos, que desde hace siete meses mantienen protestas diarias frente al establecimiento.
En un comunicado remitido a Libertad Digital, los portavoces vecinales pronostican que la concesión va a ser "inminente", tal y como "se temía". Por su parte, fuentes del área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad han justificado a Europa Press la decisión porque el local "cumple con todo".
Los residentes recuerdan que el dueño del hostal —situado en la unión de tres comunidades , en Avenida de Baviera 9 y Bruselas 74 y 76—, "podría transformarlo" en un centro de acogida de inmigrantes, como ya hizo "en otros barrios". "Se ha evitado, en principio que abra bajo el paraguas de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR)", escriben.
Sí destacan, sin embargo, que el conflicto haya alcanzado repercusión nacional y celebran que fue precisamente la presión social lo que logró que "CEAR reculase" —la ONG que valoró el uso del local "para albergar inmigrantes ilegales"—; que José Luis Martínez-Almeida garantizara que "nunca será un centro de inmigración"; e incluso que el albergue Velvet de Vallecas, que alojaba inmigrantes, cerrara en verano.
Pese a ello, y aunque reconocen que "no se ha logrado contraatacar de forma colectiva" desde el punto de vista jurídico, fuentes vecinales han confirmado a Libertad Digital que "van a recurrir porque hay fallos en la concesión" de la licencia. "Estos procesos son largos", insisten en el mencionado texto, "pero no cesarán en busca del objetivo final": "la no sumisión vecinal a este atropello".
Para los vecinos, este negocio "low cost" es un "sinsentido" por estar "incrustado en un edificio de viviendas". De hecho, bajo, sobre y junto al hostal, viven familias y menores de edad que denunciaron a este medio un "sinvivir" de ruidos las 24 horas del día. También lo es por su propia ubicación, en un barrio "sin interés turístico y alejado del centro".
En este sentido, han denunciado que cuenta con "una salida de emergencias irrisoria, y de película de Berlanga", además de incumplir la Ley de Propiedad Horizontal, la normativa municipal y los estatutos de las comunidades.
Más adelante, acusan al Consistorio de amparar "a un empresario egipcio-alemán que se salta las leyes y normas bajo la tolerancia de la administración". Relatan que, en el pasado, fue investigado por tráfico de personas después de que, durante las obras de otro de sus albergues en Pacífico, se encontrara "a una veintena de personas de la India subviviendo allí en condiciones insalubres". "A pesar de esta circunstancia se le da licencia para abrir un albergue en el Parque de las Avenidas con un acuerdo pactado para volver a hacer uso fraudulento de esa licencia", añaden.
Los residentes recuerdan que desde el pasado 26 de septiembre el local "abrió sin licencia" y que, aunque el alcalde anunció su cierre días después, "nunca ha cerrado". A su juicio, "parece que el Consistorio solo ampara a un empresario que de manera reiterada y con la actitud chulesca del que se sabe impune, se salta las leyes una y otra vez, mientras que a los vecinos nos deja totalmente abandonados y a merced de este incumplimiento reiterado de la Ley".
"No entendemos que alguien pueda abrir sin licencia y que ahora se le otorgue y no se sancione. Ahora cualquiera puede poner su casa a operar como un hotel o vender ropa en la calle sin licencia, ni permisos, ni miedo a una sanción", han expresado con indignación.
Los portavoces no descartan "ampliar las denuncias a distintos eslabones de la cadena" ni "acudir a lo penal y acusar de prevaricación a quien esté permitiendo la apertura del albergue firmando documentos e inspecciones que incluían errores constatados".
Según explican, la concesión de la licencia "se contemplaba en el plano jurídico-administrativo", pero insisten en que "no debe eclipsar que siga el ruido mediático y vecinal" para evitar que el asunto "quede en el olvido" o que impere el "vuelva usted mañana".

