
"Pensamos que las armas nucleares pertenecen al pasado y a las generaciones pasadas (...). Nosotros no estamos desarrollando ningún programa al respecto porque no necesitamos ese tipo de armas", destacó el dirigente iraní.
Respecto a la postura de la ONU, Estados Unidos y los gobiernos europeos que temen que el programa de la República Islámica busque desarrollar una bomba nuclear, Ahmadineyad señaló que no va a ceder a la presión de Occidente a pesar de las sanciones del Consejo de Seguridad y de las tensiones existentes.
"Siempre hemos creído en las negociaciones (...) esa es nuestra postura. Nada ha cambiado". "Aunque quiero dejar claro que por mucho que digan que nuestras actividades pacíficas esconden fines armamentísticos seguiremos adelante con nuestros propósitos", declaró.
