LD (EFE) El cohete hizo explosión en las inmediaciones del complejo fortificado de la embajada de EEUU y causó una alarma inmediata en la zona, que fue tomada por patrullas de vehículos blindados y artillados estadounidenses y de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), que tiene cerca su cuartel general.
Casi simultáneamente, otro cohete, que no llegó a hacer explosión, cayó frente a la embajada de Alemania, muy cerca del centro de mando de la ISAF, en un terreno baldío, dedicado a aparcamiento, junto a la oficina de acreditación para periodistas y observadores electorales montada para los comicios de este sábado.
Estos son los primeros ataques que se registran en Kabul desde el pasado 28 de agosto, cuando un coche bomba, que hizo explosión junto a la sede de la compañía de seguridad estadounidense encargada de la protección del presidente interino de Afganistán, Hamid Karzai, mató a diez personas, tres de ellas ciudadanos de EEUU.