El derrumbe de un cerro en la madrugada del martes sobre unas cuantas casas de esa pequeña población indígena de 8.900 habitantes causó un fuerte revuelo en México, debido a que las primeras informaciones divulgadas por las autoridades municipales y del gobierno de Oaxaca apuntaban a que entre 100 y 300 viviendas habían quedado enterradas.
El gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, incluso aseguró que hasta 1.000 personas podían haber fallecido, lo que finalmente no fue el caso. Cientos de soldados, paramédicos y miembros de equipos de rescate así como decenas de periodistas nacionales e internacionales se desplazaron a la zona temiendo una catástrofe.
Finalmente, el derrumbe cubrió aproximadamente una zona de 1.000 metros cuadrados, enterró cuatro viviendas (dos de ellas parcialmente) y afectó estructuralmente a otras casas vecinas.
La continuidad de las lluvias ha retrasado las labores de rescate de las personas que han quedado sepultadas.Los efectivos del Ejército, la Marina, la Policía Federal y Protección Civil que han sido enviados a dicha localidad para colaborar en las tareas de salvamento no han podido llegar a la zona debido al mal estado de las carreteras, según informó el comisionado de bienes comunales del municipio, Donato Vargas.
En este contexto, varios vecinos de Tlahuiltoltepec se han acercado hasta el lugar del siniestro, donde se calcula que hay sepultadas entre 300 y 400 viviendas, para colaborar con los equipos de rescate locales -integrados por bomberos, policías y otros funcionarios-, retirando la tierra desprendida.
Por su parte, el director del Instituto Estatal de Protección Civil, Carlos Ramos Aragón, instó a los medios de comunicación a no especular con el número de víctimas del accidente que, según adelantó, podrían ser cientos, ya que el deslave se produjo durante la madrugada mientras los vecinos dormían.
Entretanto, las autoridades de Villa Hidalgo Yalalag, un municipio cercano, han informado de la muerte de uno de los voluntarios que participaba en el rescate. Además, han solicitado al gobierno estatal la activación de un plan de prevención ante el riesgo de que también se produzcan desprendimientos en esta comunidad.