LD (Agencias)
El legislador opositor Alejandro Armas dijo al respecto que es "inconveniente" hablar de reestructuración y "plantear conflictos" entre los factores de la alianza "ahora, cuando debemos reforzar la unidad para avanzar hacia el referendo revocatorio". Sin embargo, reconoció que en la Coordinadora "hay preocupación por lograr una mayor eficacia en las acciones políticas" destinadas a concretar la salida democrática de Chávez.
El reciente rechazo por el Poder Electoral de las más de tres millones de firmas con que la Coordinadora pidió un referendo revocatorio contra Chávez originó que arreciaran las ya duras críticas en contra esa alianza. Destacados opositores como el ex constituyente Jorge Olavarría y el ex gobernador del estado industrial de Carabobo y antiguo candidato presidencial, Henrique Salas Romer, habían alertado sobre la alta probabilidad de que las firmas fueran anuladas. Las críticas contra la alianza de las direcciones sindical y patronal, partidos y asociaciones civiles de oposición empezaron tras el fracaso del paro general que promovió, entre diciembre y febrero, para forzar a Chávez a renunciar.
Los llamamientos a la "unidad" han sido una constante desde la aparición de la Coordinadora, a mediados de 2002, que ha sido calificada como una "colcha de retazos" por el Gobierno de Chávez. Armas afirmó que desde agosto pasado la Coordinadora intenta "crear una instancia de la más alta jerarquía política, para que defina las estrategias con las cuales debemos movernos hacia el revocatorio".
El reciente rechazo por el Poder Electoral de las más de tres millones de firmas con que la Coordinadora pidió un referendo revocatorio contra Chávez originó que arreciaran las ya duras críticas en contra esa alianza. Destacados opositores como el ex constituyente Jorge Olavarría y el ex gobernador del estado industrial de Carabobo y antiguo candidato presidencial, Henrique Salas Romer, habían alertado sobre la alta probabilidad de que las firmas fueran anuladas. Las críticas contra la alianza de las direcciones sindical y patronal, partidos y asociaciones civiles de oposición empezaron tras el fracaso del paro general que promovió, entre diciembre y febrero, para forzar a Chávez a renunciar.
Los llamamientos a la "unidad" han sido una constante desde la aparición de la Coordinadora, a mediados de 2002, que ha sido calificada como una "colcha de retazos" por el Gobierno de Chávez. Armas afirmó que desde agosto pasado la Coordinadora intenta "crear una instancia de la más alta jerarquía política, para que defina las estrategias con las cuales debemos movernos hacia el revocatorio".
