LD (EFE) Los distritos de Palpa y Arghakhanchi, al suroeste de Nepal, han sido escenario de violentos enfrentamientos entre terroristas de corte maoísta y soldados del Ejército nepalí. Según un comunicado del Ministerio de Defensa nepalí, difundido por los medios locales, un total de dieciocho terroristas y doce agentes fallecieron en los combates.
Los enfrentamientos tuvieron lugar dos días después de que dieciséis fueron abatidos por los agentes de seguridad el domingo pasado. El Ejército nepalí continúa sus operaciones de búsqueda por tierra y aire, mientras los ataques maoístas también siguen desde hace casi un mes, cuando los maoístas llevaron a cabo un ataque contra las fuerzas de seguridad en Tansen, el cuartel general del distrito de Palpa, en la víspera del primer aniversario del golpe de estado real, efectuado el primero de febrero de 2005 por el rey Gyanendra.
El monarca nepalí destituyó el Gobierno y asumió el poder absoluto, lo que le permitió gobernar el país ante las protestas de los maoístas, los partidos políticos del país, las organizaciones de defensa de derechos humanos y la comunidad internacional. Pese a que una de sus justificaciones por adoptar esta medida, calificada por los partidos de la oposición de "ilegal" e "inconstitucional", era la lucha contra los terroristass, pues Gyanendra acusó al ex primer ministro Sher Bahadur Deuba de haber fracasado en controlarlos.