L D (EFE)
Un comunicante, que dijo hablar en nombre de ETA, llamó poco antes de la medianoche del viernes a la Asociación de Ayuda en Carretera-DYA para avisar de que en media hora haría explosión una bomba colocada en el concesionario, situado en una zona industrial sin viviendas cerca, lo que facilitó el rápido desalojo de la zona y que no se registrara daño personal alguno. El artefacto, compuesto por 5 kilos de un explosivo aún sin determinar, estalló cinco minutos después de la medianoche en el concesionario Goñi Motor, que vende vehículos de las marcas Opel y Cadillac y cuenta con exposición, talleres propios y venta de vehículos usados.
La explosión afectó a tres vehículos situados en el expositor del concesionario, dañó las cristaleras del establecimiento y provocó otros destrozos en el local, además de ennegrecer las paredes, precisaron fuentes del departamento vasco de Interior. Esta es la sexta ocasión en que ETA coloca una bomba en Vizcaya en el último mes y medio, y se trata del segundo artefacto colocado en el mismo día contra intereses económicos, ya que la Ertzaintza desactivó el mismo viernes otro explosivo situado en las instalaciones de la empresa de transportes La Guipuzcoana, en la localidad de Azkoitia.
José Angel Abásolo, gerente del concesionario atacado, aseguró, en declaraciones a Efe , que en 21 años de actividad de este establecimiento no habían recibido "ni una amenaza, en absoluto". El gerente explicó que la explosión del artefacto afectó a la parte de la exposición del concesionario y a la zona "donde tenemos todos los coches nuevos en preparación para entregar a los clientes", así como "un poco al taller de pintura". Indicó que aún no han efectuado una cuantificación de los daños. Abásolo aseguró que el concesionario reanudará su actividad el próximo lunes, ya que, explicó, el artefacto no ha afectado la zona de reparaciones "porque no ha tocado para nada el taller mecánico, ni los de pintura ni chapa".
El alcalde de Lejona, Karmelo Sáinz de la Maza (PNV), manifestó que "hoy más que nunca ETA sobra y estorba" y señaló que el hecho de que la explosión se haya producido "mucho antes del plazo que el comunicante anónimo había anunciado" indica que "ETA, una vez más, buscaba generar víctimas humanas, si bien, afortunadamente, no se han producido". El Gobierno Vasco condenó el atentado y advirtió de que este tipo de actos "no sólo quiebran la convivencia pacífica que desean los ciudadanos vascos, sino que ponen en riesgo inversiones empresariales".
El presidente del PP del País Vasco, Carlos Iturgaiz, condenó también el atentado y advirtió a los terroristas de que "estas acciones no les van a salir gratis" ya que "el único horizonte de los etarras es la cárcel y responder ante la Justicia por sus delitos y crímenes". El coordinador de la ejecutiva del PSE-EE, Rodolfo Ares, afirmó a EFE que "ETA lleva a cabo una campaña contra los empresarios para obligarles a atender las extorsiones de la banda".
Eusko Alkartasuna condenó de manera "rotunda" la colocación de la bomba en el concesionario y emplazó a ETA a que "abandone definitivamente las armas y cumpla así con la voluntad del pueblo vasco". El portavoz de IU, Juan Sánchez Vallejo, exigió a ETA que desaparezca "de una vez por todas" y emplazó a la plataforma AuB y a la ilegalizada Batasuna a romper su silencio y condenar el atentado
El portavoz de Unidad Alavesa, Ernesto Ladrón de Guevara, se preguntó, en referencia al Plan Ibarretxe, "de qué sirve condenar los atentados de ETA, si se alimenta sus expectativas con planes nacionalistas de independencia que favorecen la estrategia de la banda armada".
La explosión afectó a tres vehículos situados en el expositor del concesionario, dañó las cristaleras del establecimiento y provocó otros destrozos en el local, además de ennegrecer las paredes, precisaron fuentes del departamento vasco de Interior. Esta es la sexta ocasión en que ETA coloca una bomba en Vizcaya en el último mes y medio, y se trata del segundo artefacto colocado en el mismo día contra intereses económicos, ya que la Ertzaintza desactivó el mismo viernes otro explosivo situado en las instalaciones de la empresa de transportes La Guipuzcoana, en la localidad de Azkoitia.
José Angel Abásolo, gerente del concesionario atacado, aseguró, en declaraciones a Efe , que en 21 años de actividad de este establecimiento no habían recibido "ni una amenaza, en absoluto". El gerente explicó que la explosión del artefacto afectó a la parte de la exposición del concesionario y a la zona "donde tenemos todos los coches nuevos en preparación para entregar a los clientes", así como "un poco al taller de pintura". Indicó que aún no han efectuado una cuantificación de los daños. Abásolo aseguró que el concesionario reanudará su actividad el próximo lunes, ya que, explicó, el artefacto no ha afectado la zona de reparaciones "porque no ha tocado para nada el taller mecánico, ni los de pintura ni chapa".
El alcalde de Lejona, Karmelo Sáinz de la Maza (PNV), manifestó que "hoy más que nunca ETA sobra y estorba" y señaló que el hecho de que la explosión se haya producido "mucho antes del plazo que el comunicante anónimo había anunciado" indica que "ETA, una vez más, buscaba generar víctimas humanas, si bien, afortunadamente, no se han producido". El Gobierno Vasco condenó el atentado y advirtió de que este tipo de actos "no sólo quiebran la convivencia pacífica que desean los ciudadanos vascos, sino que ponen en riesgo inversiones empresariales".
El presidente del PP del País Vasco, Carlos Iturgaiz, condenó también el atentado y advirtió a los terroristas de que "estas acciones no les van a salir gratis" ya que "el único horizonte de los etarras es la cárcel y responder ante la Justicia por sus delitos y crímenes". El coordinador de la ejecutiva del PSE-EE, Rodolfo Ares, afirmó a EFE que "ETA lleva a cabo una campaña contra los empresarios para obligarles a atender las extorsiones de la banda".
Eusko Alkartasuna condenó de manera "rotunda" la colocación de la bomba en el concesionario y emplazó a ETA a que "abandone definitivamente las armas y cumpla así con la voluntad del pueblo vasco". El portavoz de IU, Juan Sánchez Vallejo, exigió a ETA que desaparezca "de una vez por todas" y emplazó a la plataforma AuB y a la ilegalizada Batasuna a romper su silencio y condenar el atentado
El portavoz de Unidad Alavesa, Ernesto Ladrón de Guevara, se preguntó, en referencia al Plan Ibarretxe, "de qué sirve condenar los atentados de ETA, si se alimenta sus expectativas con planes nacionalistas de independencia que favorecen la estrategia de la banda armada".