L D (EFE)
Con Foruria Zubialdea, ya son doce los terroristas que han sido entregados este año a España para ser juzgados. De ellos, nueve fueron detenidos en Francia; uno, en México; otro, en Suiza, y Foruria, en Venezuela. La cooperación venezolana con las autoridades españolas en materia policial ha dado como fruto desde enero de 2002, la entrega a España de tres personas, todas ellas por la vía de la expulsión administrativa.
Antes de Foruria, el Gobierno venezolano expulsó el 2 de junio de 2002 a Juan Víctor Galarza Mendiola, histórico del "comando Vizcaya" en los años 80, y el 17 de diciembre, entregó a Sebastián Echaniz Alcorta, al que se le atribuyen veinte atentados y 17 muertos.
El ahora entregado José Ramón Foruria nació en Marquina, en la provincia de Vizcaya, el 13 de enero de 1949, y en 1980, se integró, según su historial policial, en un comando de información de la banda terrorista ETA junto a Jaime Rementería Beotegui, alias "Zapatillas".
Las autoridades españolas le atribuyen en ese año importantes labores de información sobre posibles objetivos de la banda, entre las que destacan las realizadas sobre empresas que no pagaban la extorsión terrorista, personas concretas o entidades bancarias. Precisamente, y según el Ministerio de Interior, una de las presuntas informaciones que proporcionó a un comando de ETA, integrado por Juan Oyarbide Aramburu y Angel Recalde Goicoechea, sirvió de base para la comisión de un atentado el 20 de septiembre de 1980, en el que murieron cuatro agentes de la Guardia Civil.
Antes de Foruria, el Gobierno venezolano expulsó el 2 de junio de 2002 a Juan Víctor Galarza Mendiola, histórico del "comando Vizcaya" en los años 80, y el 17 de diciembre, entregó a Sebastián Echaniz Alcorta, al que se le atribuyen veinte atentados y 17 muertos.
El ahora entregado José Ramón Foruria nació en Marquina, en la provincia de Vizcaya, el 13 de enero de 1949, y en 1980, se integró, según su historial policial, en un comando de información de la banda terrorista ETA junto a Jaime Rementería Beotegui, alias "Zapatillas".
Las autoridades españolas le atribuyen en ese año importantes labores de información sobre posibles objetivos de la banda, entre las que destacan las realizadas sobre empresas que no pagaban la extorsión terrorista, personas concretas o entidades bancarias. Precisamente, y según el Ministerio de Interior, una de las presuntas informaciones que proporcionó a un comando de ETA, integrado por Juan Oyarbide Aramburu y Angel Recalde Goicoechea, sirvió de base para la comisión de un atentado el 20 de septiembre de 1980, en el que murieron cuatro agentes de la Guardia Civil.