L D (Agencias) El Departamento vasco del Interior, que dirige el peneuvista Javier Balza, aseguró que "no tiene ninguna duda" de que la autoría de la explosión, que se produjo alrededor de las dos de la madrugada, corresponde a ETA.
Este atentado de ETA es el cuarto dirigido contra repetidores de comunicaciones en lo que va de año. En dos de esos atentados, las bombas eran trampas preparadas para alcanzar a los miembros de las Fuerzas de Seguridad que fueran a desactivarlas. El primero de esos atentados, según recopila Vasco Press, fue el 23 de febrero en el monte Arnótegi, de Bilbao. Los etarras colocaron el artefacto en una ventana de la caseta del repetidor y le dotaron de un sistema antimovimiento para intentar asesinar a un artificiero cuando fuera a desactivarlo.
