(Libertad Digital) El diario de Planeta asegura que ETA ya cuenta con un grupo itinerante que ha sustituido al "Elurra", desmantelado por la Guardia Civil en diciembre de 2007. La finalidad sería cometer uno o varios atentados antes de las elecciones del 9 de marzo y donde contemplarían la posibilidad real de causar asesinatos. En este sentido, pretenden castigar al presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, por los engaños que realizó a los etarras durante el proceso de negociación.
Además, su objetivo sería responder a las últimas detenciones llevadas a cabo por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y, según La Razón, avisar a Mariano Rajoy de lo que puede ocurrir en la próxima legislatura si gana los comicios generales. La formación de un grupo itinerante resultaría relativamente fácil para ETA ya que no necesitan una formación específica debido a que el explosivo se les entrega preparado y sólo tendrían que organizar la caravana.
En una información aparecida en el diario proetarra Gara, la banda afirmó que le era indiferente quién ganara el 9 de marzo, echando por tierra lo dicho por ciertos analistas que aseguraban que ETA haría todo lo posible para que el Partido Popular no ganara las elecciones.
El País dice que la estructura de ETA "está desmantelada"
Sin embargo, El País informó de todo lo contrario. Para el diario de PRISA, la banda terrorista se encuentra en una situación de extrema debilidad. De este modo, la estructura de ETA estaría desmantelada lo que le ha llevado a "perder la iniciativa". A pesar de afirmar el desmantelamiento de la estructura, aseguran que apenas quedan grupos "activos" y que han descuidado la protección de sus miembros.
De este modo, informaron que "ETA sólo se fía de un grupo de incondicionales a los que ha convertido en chicos para todo" y que "carecen de los más elementales medios para desarrollar su actividad terrorista sin poner en riesgo su seguridad". Por último desde este diario aseguraron que ETA "tiene un serio problema" y que de tratarse de una empresa privada los accionistas habrían pedido hace tiempo el cese del consejo de dirección, lo que no ocurre "por la excusa de la seguridad y la amenaza de las pistolas" que hipotecan "el más mínimo comentario crítico hacia la actual dirección".