L D (Agencias) El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ordenó este jueves el ingreso en prisión de cinco de los nueve detenidos el pasado martes, en el País Vasco y Navarra, por su presunta vinculación con el aparato de captación de ETA que hasta el momento han pasado a disposición judicial.
Según informaron e Efe fuentes judiciales, el juez dejó en situación de detención judicial a Iván Medina, a la espera de tomar declaración este viernes a otros siete detenidos en esta misma operación. En el auto dictado tras interrogar a estos nueve detenidos, Garzón acuerda además dejar en libertad sin cargos a Francisco Agustín Cabo, con fianza de 1.000 euros a Amaya Mundiñano y con la obligación de comparecer semanalmente en el juzgado más próximo a su domicilio y con la prohibición de abandonar España a Aitziber Igoa y Gustavo Fernández.
De este modo, ingresan en prisión incondicional Lorea Azpilicueta, "Itzi", Igor Astibia, "Xume", y Maider Viso, "Alaitz", a los que se imputa un delito de pertenencia a banda armada como integrantes del aparato de captación de ETA, así como Francisco Agustín Cabo, a quien se le mantiene la incomunicación para favorecer la práctica de diligencias y Koldo Lekuona, ambos acusados de colaboración con banda armada. A este último, según el auto, le fueron intervenidos en el registro de su domicilio "efectos relacionados con la violencia callejera y los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado" y su nombre aparece entre la documentación incautada al dirigente etarra Ibón Fernández Iradi, "Susper", a raíz de su detención en Francia en diciembre de 2003.
En esa documentación, supuestamente escrita por el presunto etarra Agustín Figal Arranz y encabezada por la expresión "Arri", se presenta a Lekuona "como poseedor de información de 'txakurras' (policías) y dispuesto a 'dar caña'". En relación con los llamados "papeles de Susper" también figura Maider Viso, quien, según Garzón, se encuentra integrada en el subaparato de captación de ETA en Vizcaya en el que "desplegó su acción hasta finales de 2002". Viso habría mantenido unas siete citas entre el 22 de mayo y el 30 de diciembre con Lorena Somoza Chamizo, detenida junto a Fernández Iradi, y a la que facilitó nombres y datos de personas a captar.
Además asumió las tareas de "banatzaile" y "proposatzaile", consistentes en el reparto y distribución de cartas remitidas por ETA para la captación de nuevos militantes, y "en cumplimiento de esa función hizo llegar sendas cartas a Ana López Monje, actualmente en paradero desconocido por su pertenencia a ETA y otra a un individuo de la localidad de Lezama (Vizcaya)", explica el auto. Igor Astibia se encuentra integrado en el subaparato de captaciones de ETA en Navarra desde diciembre de 2002 y mantuvo varias citas con "Susper", una de las cuales estaba marcada para el 24 de enero de 2003, aunque dado que el dirigente etarra había sido detenido un mes antes esta no se pudo celebrar. También integraba el subaparato de captaciones desde el verano de 2002 Lorea Azpilicueta, quien a su vez fue captada por la presunta etarra huida a Francia Beltzane Obanes, "Pili".
Dentro de las labores de infraestructura y apoyo a ETA se enmarcarían las actuaciones de Aritz Romanelli, quien tras su detención en esta operación fue puesto en libertad por razones médicas, y Aitziber Igoa, a los que se atribuye haber prestado una vivienda para ocultar a miembros de ETA entre 1999 y 2002 en Zumaia (Guipúzcoa). De Amaia Mundiñano y Francisco Agustín Cabo, Garzón señala que de la documentación intervenida se desprende que ambos habrían desempeñado labores de apoyo a ETA en Navarra, al menos, hasta diciembre de 2002. De hecho, añade, Cabo habría prestado su domicilio de Antzuola para que fuera utilizado por integrantes de la banda.
Respecto a Gustavo Fernández Villate, el juez indica que su relación con ETA parece acreditada al aparecer su nombre codificado en la documentación incautada a "Susper" en un folio encabezado con la expresión "Baraka Herg".
Sin embargo, según matiza Garzón, esa relación con la organización terrorista no se ha concretado "en este momento procesal" más allá de que conocía a los etarras Iñigo Makazaga, Francisco Eguiluz Fernández y Joseba Imanol Cortaza, al que prestó su vehículo en 2001, "pero sin que conste el conocimiento de su vinculación con ETA".
Prosigue la toma de declaraciones
Este viernes está previsto que el juez tome declaración a otros siete detenidos en esta operación -Ibon Urrestarazu, Alaitz Iturrioz, Margarita Eizagarri, Gorka Jaunarena, Izaskun Villanueva, Rubén Nieto y Jon Duque- que sigue abierta y en la que en los últimos días han sido arrestadas otras dos personas. Además, cuatro jóvenes comparecieron voluntariamente esta mañana en la Audiencia Nacional en relación con esta operación y Garzón decidió citarles para el próximo lunes.