L D (Agencias) El registro de la vivienda de Lons, cerca de Pau, donde el jefe etarra y sus lugartenientes fueron detenidos el pasado martes, permitió el hallazgo de anotaciones y documentos relativos a recientes compras de armas cortas y subfusiles procedentes del mercado negro.
A su vez, atribuyen a Palacios contactos y posibles negociaciones con grupos mafiosos de la zona de Marsella con el fin de acopiar explosivos para la fabricación de coches bomba y artefactos explosivos de cara a la campaña de atentados que preparaba con Juan Luis Rubenach, Iñigo Vallejo y José Miguel Almandoz Erviti en el caserón de Lons, cuando todos ellos fueron arrestados.
Según informa la agencia Europa Press, la Policía atribuye los robos en dos polvorines cercanos a Niza, denunciados el pasado mes de octubre, a la delincuencia organizada de Marsella. En los atentados cometidos en Córcega se utilizó un material similar: 96 kilos de "Iramita 4000", de fabricación francesa destinado a minas y canteras, y de otra partida de 25 kilos del mismo explosivo. La merma de explosivos de fabricación industrial en el arsenal de ETA ha quedado patente tras la intervención de diez toneladas en operaciones policiales tanto en Francia como en España.
ETA recurrió al amosal para cometer su último atentado contra el cuartel del Ejército de Tierra en Aizóain (Navarra) con artefactos artesanales "hondia" lanzados sin conseguir su objetivo de asesinar a personal del acuartelamiento. Además, la banda terrorista cometió el último robo de envergadura para hacerse con explosivos en marzo de 2001, en Grenoble, donde se adueñó de 1.600 kilos de dinamita. Con anterioridad, el asalto más importante tuvo lugar en en Plévin (Bretaña) en septiembre de 1999, donde se hizo con 7.725 kilos de Titadyne.