
L D (EFE)
La Policía Científica está analizando un trozo de tela, de color azul oscuro, que al parecer envolvía el explosivo y que podría pertenecer a una prenda de vestir. El artefacto fue colocado en un árbol, en la zona de la que parten las ramas, a casi dos metros del suelo, pero el hecho de que estuviera hueco provocó que la onda expansiva fuera menor. Casi simultáneamente explotó otra bomba de similares características en la localidad asturiana de Gijón.
