L D (EFE) Según los datos presentados este miércoles en el Congreso por el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Jorge Fernández, los españoles son pesimistas respecto a los principales problemas.
Así, son más quienes piensan que este año empeorará la situación del paro, la inseguridad ciudadana, las drogas, el medio ambiente y la vivienda, mientras que la mayoría confía en una mejoría de la asistencia sanitaria y los encuestados están divididos respecto a cómo será la evolución del terrorismo.
A más largo plazo, los españoles creen que el paro, la pobreza y la marginación seguirán siendo un grave problema en este siglo, dudan de que vaya a haber alimentos suficientes para todos y de que las nuevas tecnologías consigan reducir el paro, mientras que están "más bien de acuerdo" en que las mujeres alcanzarán la misma presencia que los hombres en todos los ámbitos de la sociedad.
Así, son más quienes piensan que este año empeorará la situación del paro, la inseguridad ciudadana, las drogas, el medio ambiente y la vivienda, mientras que la mayoría confía en una mejoría de la asistencia sanitaria y los encuestados están divididos respecto a cómo será la evolución del terrorismo.
A más largo plazo, los españoles creen que el paro, la pobreza y la marginación seguirán siendo un grave problema en este siglo, dudan de que vaya a haber alimentos suficientes para todos y de que las nuevas tecnologías consigan reducir el paro, mientras que están "más bien de acuerdo" en que las mujeres alcanzarán la misma presencia que los hombres en todos los ámbitos de la sociedad.
Principales objetivos
Los principales objetivos que los ciudadanos marcan para la sociedad española en el futuro coinciden con los que sitúan como problemas más graves, paro (63,1 por ciento), terrorismo (43,3 por ciento) e inseguridad ciudadana (23,3 por ciento). Así, el 53,6 por ciento cree prioritario combatir el terrorismo, el 49,9 por ciento opina que hay que centrarse en reducir el paro y el 25,8 por ciento apuesta por la lucha contra la delincuencia.
La lucha contra la subida de los precios, prioritaria para el 21,9 por ciento de los ciudadanos, parece corresponderse con el hecho de que el 18,8 por ciento de los ciudadanos sitúe la vivienda como uno de los principales problemas del país. Sube hasta el 37,3 por ciento el porcentaje de españoles que opina que la situación económica general es "buena" o "muy buena", dato que no se daba desde julio de 2000.
En cuanto a la situación política, asciende a un 26 por ciento la cifra de encuestados que la interpretan como "buena" o "muy buena", un punto más que en noviembre de 2003; se mantiene la evaluación negativa en un 15,9 por ciento y la "regular" en un 40,2 por ciento.
