LD (EFE)
Según fuentes de la investigación, los hoteles donde pensaban atentar
Jon Joseba Troitiño
y
Asier Eceiza Ayerra
están ubicados en Torremolinos y Málaga, ciudades de las que los terroristas poseían planos detallados. La Policía ha llegado a esta conclusión por el hallazgo de estos planos en el piso que habían alquilado en Valencia, y que abandonaron una vez que sus identidades fueron difundidas por las fuerzas de seguridad.
El objetivo de los etarras era cometer estos atentados en hoteles de similares características que los de Alicante y Benidorm, es decir no muy grandes y discretos. Según las mismas fuentes, los investigadores no descartan que la intención de los terroristas fuera que estos dos atentados se cometieran de forma casi simultánea.
La Policía localizó en el piso de Valencia, situado en la calle de Juan Ramón Jiménez, un importante material para cometer atentados, así como anotaciones manuscritas sobre posibles objetivos. Durante el registro, se encontraron casi tres kilos de dinamita titadyne, ocho detonadores eléctricos, temporizadores, 80 centímetros de cordón detonante y dos fiambreras preparadas para su utilización como bomba-lapa.
Los investigadores no descartan que estos dos terroristas pudieran pensar en la comisión de otro tipo de atentados con estas dos bombas-lapa, pero se inclinan más por la idea de que tuvieran la intención de, una vez montadas, entregárselas a otro comando, pues las acciones de Troitiño y Eceiza estaban centradas contra el turismo.
El objetivo de los etarras era cometer estos atentados en hoteles de similares características que los de Alicante y Benidorm, es decir no muy grandes y discretos. Según las mismas fuentes, los investigadores no descartan que la intención de los terroristas fuera que estos dos atentados se cometieran de forma casi simultánea.
La Policía localizó en el piso de Valencia, situado en la calle de Juan Ramón Jiménez, un importante material para cometer atentados, así como anotaciones manuscritas sobre posibles objetivos. Durante el registro, se encontraron casi tres kilos de dinamita titadyne, ocho detonadores eléctricos, temporizadores, 80 centímetros de cordón detonante y dos fiambreras preparadas para su utilización como bomba-lapa.
Los investigadores no descartan que estos dos terroristas pudieran pensar en la comisión de otro tipo de atentados con estas dos bombas-lapa, pero se inclinan más por la idea de que tuvieran la intención de, una vez montadas, entregárselas a otro comando, pues las acciones de Troitiño y Eceiza estaban centradas contra el turismo.
