L D (Agencias) La primera reforma estatutaria que llega al Palacio de la Carrera de San Jerónimo en la presente legislatura comenzará su tramitación el día 19. La Mesa del Congreso discutirá entonces su admisión a trámite y casi con toda seguridad la dará vía libre aunque contará con los votos en contra de los cuatro representantes que el PP tiene en el órgano de gobierno de la Cámara. Votarán a favor de su calificación los tres diputados del PSOE, incluido Marín, el representante de CiU y la de Izquierda Verde.
Una vez calificado por la Mesa, el Plan Ibarretxe será publicado en el Boletín Oficial de las Cortes y remitido al Gobierno, que dispone de un plazo limitado para argumentar el rechazo a su debate, aunque en este caso no hará uso de él porque el presidente Zapatero ya ha dejado claro que quiere el debate en el Pleno del Congreso.
El siguiente paso será fijar en la Junta de Portavoces la fecha para discutir su toma en consideración en el Pleno del Congreso. Según los usos parlamentarios, en la primera sesión plenaria de cada mes se discuten las propuestas que llegan desde los Parlamentos autonómicos, dándose prioridad a las que referidas a reformas de Estatuto.
Puesto que en el primer pleno de febrero ya está previsto el debate de una proposición de ley del Parlamento catalán, y modificarlo requeriría una unanimidad para cambiar costumbres parlamentarias que en principio no existe, se calcula que el Plan Ibarretxe no llegará al Pleno de la Cámara hasta la primera sesión plenaria de marzo, previsiblemente el día 8.
Como en cualquier debate de una iniciativa autonómica, el Parlamento vasco tendrá que designar a tres de sus diputados para presentar el proyecto ante el Congreso, sin que a priori se descarte que acuda el propio Ibarretxe. Este viernes, durante su estancia en el Congreso para registrar la propuesta rupturista, el presiente del Parlamento vasco ya ha adelantado que alguno de los parlamentarios vascos de la ilegalizada Batasuna podrían formar parte de esa delegación.
