Menú
PERTENECÍAN AL GRUPO “ANDALUCÍA”

Quince años de cárcel para los etarras Iragi y Solana por un atentado frustrado contra un militar

La Audiencia Nacional ha condenado este martes a quince años de prisión a los miembros del grupo “Andalucía” de ETA Igor Solana y Harriet Iragi por la colocación de una fiambrera-bomba en el vehículo de un brigada del Ejército destinado en Sevilla al que pretendían asesinar. Afortunadamente, el artefacto falló.

L D (EFE) En una sentencia notificada este martes, la sección primera de la sala de lo penal de este tribunal considera probado que, en la madrugada del 4 al 5 de octubre de 2001, los acusados forzaron el vehículo del militar, que había dejado estacionado en la calle del Almirante Topete de la capital andaluza, "y colocaron bajo el asiento del conductor una fiambrera conteniendo 1,5 kilogramos de explosivo". El artefacto, sin embargo, y a pesar de contar con un sistema de iniciación eléctrico que se activaba por inercia al moverse, "no explosionó en el momento en que los procesados tenían previsto por causas técnicas desconocidas y ajenas a la voluntad de éstos".

De hecho, el brigada cogió su vehículo esa mañana y se desplazó con el mismo hasta Chipiona, y no fue hasta descender del automóvil en la localidad gaditana cuando advirtió que había una fiambrera debajo del asiento que él ocupaba, "por lo que pensó que era comida que su mujer le había preparado por si decidía quedarse a dormir en Chipiona en vez de regresar a Sevilla". Tras hablar por teléfono con su esposa, que le aseguró que no le había dejado nada en el coche, el militar cogió la fiambrera, "momento en que oyó una pequeña detonación, por lo que sospechando que podía tratarse de un artilugio explosivo la depositó nuevamente en el suelo del coche".

Finalmente, el artefacto estalló accidentalmente cuando los técnicos especialistas en desactivación de explosivos (TEDAX) trataban de extraerlo del vehículo, provocando la destrucción del automóvil y causando daños en algunas viviendas cercanas.

La sentencia dice que el brigada "ha sido declarado en situación de incapacidad permanente total a causa del síndrome de estrés postraumático crónico que padece como consecuencia de los hechos", habiendo anticipado su jubilación en veintiún años y precisando aún hoy tratamiento psiquiátrico, psicológico y farmacológico. El tribunal, que basa su condena en la declaración inculpatoria de Solana, considera que los hechos son constitutivos de un delito de homicidio terrorista en grado de tentativa, por lo que condena a los dos procesados a quince años de prisión y les impone el pago de una indemnización de 176.648 euros al militar.

Temas

En España

    0
    comentarios

    Servicios

    • Radarbot
    • Curso
    • Inversión
    • Securitas
    • Buena Vida
    • Reloj Durcal