L D (EFE) En la citada proposición no de ley se dice que el Congreso apoya el regreso del contingente español "en el menor tiempo y con la mayor seguridad posibles", con lo que sigue lo estipulado por el Gabinete Zapatero el pasado día 18.
El debate y la posterior votación del texto promovido por los socialistas tendrá lugar después de la comparecencia del presidente del Gobierno ante la Cámara, en la que dará explicaciones sobre su decisión de abandonar Irak.
El debate y la posterior votación del texto promovido por los socialistas tendrá lugar después de la comparecencia del presidente del Gobierno ante la Cámara, en la que dará explicaciones sobre su decisión de abandonar Irak.
No obstante, la inclusión del debate y votación de la proposición no de ley en el Pleno del martes debe ser ratificada por el PP en la Junta de Portavoces, ya que la modificación del orden del día requiere del consentimiento de todos los grupos.
Diego López Garrido, secretario general del Grupo Socialista, ha dicho que espera que el Grupo Popular acepte discutir la propuesta el próximo martes; en caso de que no lo hiciera –ha advertido–, el debate se incluirá en la siguiente sesión plenaria.
En el texto promovido por los socialistas se pide a la Cámara Baja que exprese "el compromiso de España con la estabilidad, soberanía, integridad territorial y reconstrucción de Irak", así como "su solidaridad con el pueblo iraquí y la plena colaboración con Naciones Unidas".
El tercer punto hace referencia a "la firme decisión de las fuerzas políticas de luchar contra todo tipo de terrorismo, respetando la legalidad internacional, en estrecha colaboración con nuestros aliados, y particularmente con la UE".
Asimismo, los redactores del escrito creen que ha habido un empeoramiento de la situación en Irak, que "no ha sido posible" lograr que la ONU asumiese el control político y militar y que no es "razonablemente previsible que lo pueda hacer antes del próximo 30 de junio".
Además, dicen que el anterior Gobierno acordó el despliegue de tropas en Irak en contra de la opinión pública, sin consultarlo con el Parlamento y sin el respaldo de la ONU.
