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¡Expúlsese! Un Chávez catire en la White House

Para ser autoritario no se necesita estar en ninguna parte del espectro político. Los autoritarios se unen.

Para ser autoritario no se necesita estar en ninguna parte del espectro político. Los autoritarios se unen.
El presidente Donald Trump en su llegada a la Casa Blanca tras su viaje a Europa. | LD/Agencias

Los venezolanos fueron los primeros en ser traicionados por el sátrapa que vuelve a presidir los Estados Unidos. Y poco tardaron los ucranianos en comprobar el valor de la palabra de Trump. O quizá lo advirtió y muchos solo escucharon lo que querían escuchar. Ambos son pueblos que luchan heroicamente contra tiranías comunistas. Ambos son mártires. Moneda de cambio del Nuevo Desorden Mundial.

Trump "da la vuelta de manera orwelliana a la verdad, convierte la verdad en mentira y la mentira en verdad", afirma Cayetana Álvarez de Toledo. ¿A cuántos ha engañado? "Muchísimos venezolanos le votaron. Estaban convencidos de su respaldo a la causa opositora en el ámbito político. Pero hoy gran parte de esos venezolanos dicen que fueron traicionados, engañados y decepcionados por el presidente por el que votaron". Fernando del Rincón, el presentador de la cadena CNN en español, editorializaba el pasado 13 de febrero sobre los efectos de una de las primeras decisiones de los nuevos mandamases trumpeteros: la orden de revocar la extensión del Estatus de Protección Temporal (TPS). "Revirtiendo una decisión de la Administración Biden y despejando el camino para que más venezolanos sean elegibles para la deportación en el marco de esta política inmigratoria de mano dura de Donald Trump", añadía del Rincón. Afecta a más de medio millón de personas que estaban protegidas hasta el otoño de 2026. Ahora su estatus caduca el próximo mes de abril.

El Congreso de los Estados Unidos modificó en 1990 la Ley de Inmigración y Ciudadanía y estableció la figura del Estatus de Protección Temporal. Se aplica a personas de ciertas nacionalidades que no pueden regresar a sus países de origen de forma segura, ya sea por un conflicto armado en curso, un desastre natural u otras condiciones extraordinarias de carácter temporal. No es un invento woke. Se aprobó al año siguiente de la llegada a la presidencia de George H. W. Bush.

Tres días antes del acto de perjura de Trump, el pasado 17 de enero, el secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) Alejandro Mayorkas aprobó una modificación del TPS para los ciudadanos venezolanos ampliando su vigencia hasta octubre de 2026. Como es sabido, en casa del pobre dura poco la alegría. 11 días, ni uno más, tardó la nueva secretaria del DHS, la trumpetista Kristi Noem, apodada lamataperros (en sus memorias reconoce haber matado a una de sus mascotas porque la incordiaba), en revocar la ampliación de la vigencia. Que vayan preparando las maletas y si no tienen dónde ir, seguro que Maduro los recibe de brazos abiertos. Después, la secretaria Kristi, maqueada y vestida de heroína, salió a cazar aliens, que es como se dice extranjeros en inglés. Dirigió una de las primeras redadas y capturaron algunos ejemplares en Nueva York que, según dicen, es una ciudad "santuario" del crimen. Como para ir de turismo. Te echa el ojo un revirado de esos extra king size 2 x 2 que te reciben todo amabilidad en el aeropuerto JFK, te pones nervioso, te entra la risa floja y terminas deportado. Además te pierden la maleta o te birlan las sedas. Donde esté Barajas…

Le pregunto a Tomás Páez, catedrático de sociología de la Universidad Central de Venezuela, cuál puede ser el motivo por el que se ha ordenado retirar el estatus de protección para los venezolanos y no para el resto de nacionalidades. Páez, nacido en Tenerife en 1953, es uno de los miles de ciudadanos que abandonaron su país y fueron acogidos como iguales en Madrid. Es el coordinador del Observatorio de la diáspora venezolana, una red internacional de organizaciones que trabajan en pro del bienestar de sus compatriotas en el exilio.

"En la actualidad los países hispanos afectados por el estatus de protección, junto a Venezuela, son Nicaragua, Honduras y El Salvador. Además de Ucrania, Yemen, Haití… hasta un total de 17 naciones, cuyos ciudadanos pueden acogerse al TPS. A todos les amplió la duración el secretario del Departamento de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas, pero la única revocada (por lamataperros) es la que afecta a los venezolanos. No tenemos una explicación", reconoce Páez.

Quizá esa explicación se encuentre en un trueque: petróleo por deportados. Fíjense en la secuencia. El pasado 31 de enero, Richard Grenell, enviado especial de Trump, se reúne en Caracas con Maduro. El régimen chavista destacó del encuentro que "fueron abordados temas de interés para ambos países, como la migración y el impacto negativo de las sanciones económicas". El Nuevo Herald titulaba a los pocos días: "Magnate de Florida orquestó intercambio de petróleo por migrantes de Trump con Maduro". Informaba el periódico de que "el objetivo de Maduro era aprovechar la aceptación de su país de los deportados venezolanos para el levantamiento parcial o total de las sanciones estadounidenses contra PDVSA". Según el Herald, "Maduro solicitó que el Departamento del Tesoro renovase la licencia que permitirá a Chevron USA seguir extrayendo petróleo durante otros seis meses". Chevron representa aproximadamente el 25% de la producción petrolera de Venezuela. La licencia se prorrogó automáticamente el sábado 1 de febrero, tras la salida del enviado especial americano. Ese mismo día, la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, firmaba la cancelación del Estatus de Protección Temporal para los ciudadanos venezolanos. Ya saben ustedes que las coincidencias no existen.

Le pregunto al profesor Páez por el significado de la expresión "un Chávez catire", que ha empleado durante nuestra conversación. "Es un Chávez rubio, pelirrojo. Así le llaman a Trump en Nueva York". Adelys Ferro, la directora del Caucus Venezolano-Americano, explica las similitudes: "Los dos entendieron que la manera de aglutinar poder era polarizar y dividir. Los dos definen a sus adversarios políticos como sus enemigos. Los dos se basan en el mandato popular que obtuvieron para saltarse los poderes del Estado. Para ser autoritario no se necesita estar en ninguna parte del espectro político. Los autoritarios se unen". Se atraen.

Volodimir Zelensky y María Corina Machado. Venezuela y Ucrania. Dos pueblos abandonados. Dos héroes traicionados. "Qué victoria para los enemigos de la libertad. Qué vergüenza para Occidente", escribe en X la diputada del PP Álvarez de Toledo. Nuestra Europa, con sus defectos y sus muchas virtudes, es hoy más necesaria que nunca. "Europa ha de trabajar… por aquella dignidad del hombre que habían descubierto las mejores tradiciones: además de la bíblica… también las de época clásica, medieval y moderna, de las que nacieron las grandes creaciones filosóficas y literarias, culturales y sociales", Benedicto XVI en la Plaza del Obradoiro, 6 de noviembre de 2010.

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