
Y la casta divina se hizo presente y así se dirigió a las masas: Yo soy el camino, la verdad y la vida, ven y sígueme. Y los medios lo distribuyeron en forma de Manifiesto. Un apoyo al fraude sanchista sin rubor alguno bajo la engañifa de un título sincronizado con el gobierno de Pedro Sánchez: "Por avances en Derechos Sociales y Políticos. Contra los intentos de involución". Empezamos mal. Al bien absoluto (Derechos), la alerta contra la fachosfera (involución). No hay mayor fascista que quien pretende poner un bozal al que no piensa como ellos.
Con la que está cayendo, entretenerse con la impostura de nuestros famosos, parece frívolo. Pero no lo es. Si este gobierno se permite romper todas las reglas es porque un enjambre de seres divinos, intelectuales orgánicos y medios de comunicación cómplices se empeñan en sostener la ficción de que nos gobierna una coalición progresista de izquierdas impoluta, y única garantía de políticas sociales imprescindibles para defender a las clases menos favorecidas de la amenaza de la ultraderecha al acecho.
Nuestros divinos: Pedro Almodóvar, Ana Belén, Miguel Ríos, Carlos Bardem, Serrat, Lola León…, después de siete décadas de presencia mediática siguen creyéndose la sal de la tierra. ¿Qué les hace ir por la vida con esa superioridad moral incuestionable? En términos sociales ninguno de ellos es obrero, ni siquiera de clase media, todos, sin excepción, pertenecen a una casta de seres divinos, que van por el mundo de Teresa de Calcuta, Martin Luther King y, alguno, aún después de lo que ha llovido, con la camiseta del Ché. ¡Qué maravilloso es ir por el mundo con buena conciencia a costa de ensuciársela a los demás!
No haré un análisis del Manifiesto, sería inútil desbrozar las evidencias que el propio texto muestra sin rubor. Arriba está linkado. Si acaso, titularlo: Mi Dios es el único verdadero.
Todos tenemos derecho a una opinión sobre el mundo, y defenderla. Pero nadie, ningún derecho a la impostura. Se entiende que quien va, o vamos esnifados de superioridad moral, es porque creemos en principios mejores que los demás, y los defendemos con coherencia. Si esa izquierda abajofirmante criticó a la Iglesia históricamente, se debió, entre otras cosas, a que predicaba una cosa y hacía otra (Sepulcros blanqueados, se decía)
Me temo que los abajofirmantes se parecen demasiado a sus demonios. Aun cuando Ana Belén o Bardem, por poner un ejemplo, defendieran sinceramente las políticas sociales del Gobierno, así como sus principios básicos de igualdad y el cumplimiento de la ley en contra de cualquier privilegio, ¿cómo defender a ese Gobierno que los incumple con maneras de estafador y tirano?
Ana Belén y Bardem habrían de saber que la concesión de la amnistía solo fue una transición mafiosa entre unos delincuentes poderosos y un mentiroso que quería ser presidente. Ni ejemplaridad, ni principios ideológicos, ni honradez, sino prevaricación, mentiras y suciedad moral. No me meto con su posición ideológica respecto a la amnistía. Podríamos no estar de acuerdo, pero respeto su derecho a que la consideren políticamente loable. ¿Pero su origen, su trámite y su fin fueron loables…? Sepulcros blanqueados.
Veamos el principio fundamental de la izquierda: La igualdad. El gobierno al que apoyan en el Manifiesto está empeñado en otorgar privilegios económicos a territorios pudientes, como Cataluña, bajo la engañifa lingüística de un acuerdo singular. Admirada Ana Belén, admirado Joan Manuel Serrat, la progresividad fiscal, santo y seña de la izquierda progresista, impone gravámenes mayores a los ricos que a los pobres para compensar desigualdades y alcanzar una mayor justicia social. Igualdad y justicia aquí van de la mano. Pero resulta que declináis pedirle cuentas cuando pretende otorgar a Cataluña unos privilegios fiscales que nunca concederíais a las personas más ricas. Vosotros que tan preocupados estáis por la igualdad y los servicios sociales, descuidáis que tras ese cupo catalán encubierto agraváis las diferencias entre comunidades y ciudadanos. Como en el caso de la amnistía, no trato de impedir que tengáis ésta u otra ideología, pero… ¿no os parece que habrías de ser coherentes con las lecciones de superioridad moral que habéis dado toda la vida a los demás?
Quizás un ejemplo baste. Un antiabortista no puede indignarse por la existencia del derecho al aborto, y a continuación ir a Londres con su hija a abortar. Sepulcros blanqueados. Podemos respetar una opción u otra, pero no su incoherencia. Ana, Joan Manuel, Bardem, ¿sabíais que ahora mismo El País Vasco cuenta con unas financiación por habitante de 6.614 euros, mientras comunidades como Madrid (3.104), Andalucía (3.142) o Murcia (2.910) solo la mitad o menos? ¿Por qué? Por un privilegio territorial que ahora pretende también Cataluña. Si el gobierno fuera coherente con su sentido de la igualdad, debería acabar con esos derechos históricos del cupo Vasco y el concierto de Navarra, que son puros privilegios y un agravio al resto de españoles. (Podéis ver el cuadro entero en el libro: "La factura del cupo catalán: Privilegios territoriales frente a ciudadanía", que viene a poner cifras al tocomocho. Más allá de lo justo o injusto, sólo pretendo remarcar la incoherencia entre vuestra superioridad moral y los hechos. Sepulcros blanqueados.
Supongo que de la corrupción y el putiferio, mejor no hablar, y de meter mano a la justicia por debajo de la toga, ni imaginárselo, no fuere a suceder que os dierais cuenta de pronto, que del PSOE de Felipe González y de la IU de Julio Anguita no quedan ni las raspas. Bueno, sí, una cloaca moral en su lugar que apesta.
CODA: Releer con atención y provecho la alegoría de la Caverna de Platón, no fuera que hayais confundido focos, pasarelas, fama y besos con la luz cegadora del sol y os hayan deslumbrado. Como a Platón, que después de darnos la mejor lección de la historia, no tuvo la deferencia de preguntarse desde dónde hablaba él.
PD. Mientras escribía este artículo, ha visto la luz otro manifiesto de izquierdas, que replica con argumentos de igualdad y ciudadanía al atropello del Cupo catalán. Lo ha promovido Izquierda Española. Con sus abajofirmantes. Una bendición que surja del seno de la izquierda un debate de ideas y no sólo de emociones y catecismos. Aquí lo tienen, por si quieren hacer el ejercicio de libertad más hermoso de un ciudadano, leer los dos y contrastar: <<Contra el "cupo catalán" y en defensa de la igualdad entre españoles>>.
