
Varias de las placas (entre ellas la de nuestro padre) recientemente colocadas en Durango recordando a las víctimas de ETA han sido objeto de un cobarde atentado. Este hecho refleja hasta qué punto un sector de nuestra sociedad SIGUE infestada de odio y por tanto ENFERMA, PROFUNDAMENTE ENFERMA, de destructividad… y de miseria moral.
Esto no es un desahogo; como Psicoterapeuta con varias décadas de experiencia sé muy bien lo que es la patología. Hay también un sector (siempre lo ha habido) que "mira cómodamente a otro lado" porque "no quiere líos". Ese sector es especialmente peligroso…y cómplice de la barbarie, puesto que la maldad no prosperaría si una gran mayoría se opusiera a ella con toda decisión Pasar página apresuradamente sobre el capítulo negro y sangriento del terrorismo falseando la historia no es desde luego la forma de fabricar un futuro mejor.
De los autores del cobarde y vil atentado no pueden decirse que muestren una conducta especialmente inteligente, más bien se mueven en los parámetros de todo lo contrario. Al hacerlo sólo reflejan su profunda miseria moral y un nivel de inteligencia… manifiestamente mejorable.
¿Eso es todo lo que saben hacer?
Algunos procuramos a través de nuestro trabajo ser útiles a la sociedad. Naturalmente en la sociedad ha habido y hay sectores que luchan contra la barbarie, algunos valiente y hasta heroicamente. Cada uno al mirarse al espejo verá dónde se coloca a través de sus actos. Si no somos conscientes de la gravedad y por tanto de la necesidad de extirpar ese tumor maligno que nos invade, que lleva muchas décadas invadiéndonos, nos espera un negro porvenir como sociedad
El hecho vandálico que nos ocupa no me sorprende precisamente. Es más: Contaba con ello. Tengo malas noticias para los autores: No es que el hecho me resulte, obviamente, indiferente, pero tampoco me duele especialmente. A mi padre (nuestro) padre ya le mataron una vez (¡eso sí dolió!) pero esto no. Personalmente me lo tomo (nos lo tomamos) como un autorretrato en el que los autores se definen en su nivel de miseria moral, cobardía e impotencia.
La vida sigue, cada uno dirige la suya y la mía desde luego la dirijo yo, no éstos… individuos (pongo un término que sea publicable). No pueden ni de lejos deprimirme ni mucho menos amargarme con su patética exhibición de estulticia e indignidad moral (son cosas que van necesariamente de la mano). Repito: Antes mataban y secuestraban. Ahora esto… ¿Eso es todo lo que saben hacer?
Tampoco el atentado nos desmoraliza: RECLAMAREMOS SIEMPRE LA JUSTICIA PENDIENTE DE TODOS LOS CASOS SIN RESOLVER… denunciando la hipocresía de quienes han mirado hacia otro lado y siguen haciéndolo. El ejemplo de nuestro padre y su memoria nos consuela siempre…
Nadie puede aspirar a más que a dejar un buen recuerdo en los demás… y nuestro padre lo dejó en todos quienes le trataron, hasta el punto de que en su día hubo una manifestación de repulsa por su atentado (algo casi impensable en 1980). Nos sentimos afortunados por ello. "Pintarrajear" una placa no puede cambiar esto. Por supuesto toda mi (nuestra) solidaridad hacia el resto de víctimas.
Quiero aprovechar éste espacio para dejar bien claro que en contra de lo que algún medio ha publicado de modo perverso y malintencionado que de ninguna manera la familia con nuestra ausencia en el acto de colocación de las placas pretendió boicotearlo.
Por el contrario, respetamos y valoramos el acto de la colocación de las placas citadas y el gran esfuerzo de quien ha luchado porque salieran adelante como UN PASO MUY POSITIVO… PERO AÚN INSUFICIENTE…
Con nuestra ausencia quisimos llamar la atención sobre algo que nos parece absolutamente clave:
Los 358 casos de asesinatos de ETA sin resolver… y que siguen reclamando la JUSTICIA PENDIENTE.
¿A nadie se le cae la cara de vergüenza al obviar (interesadamente) este sangrante hecho (nunca mejor dicho)? Debería…
Lo he dicho más veces: La causa de las VT es la causa de toda persona decente. Pero las cosas no se logran solas, hay que luchar por ellas. Una llamada de atención a los "iluminados" que dicen: "Ya está. ETA no mata" ¡No lo necesita! No es por arrepentimiento. Siguen ahí, sembrando su odio, lamentablemente… y sacando buena tajada de ello. Para nada "ya está". Hay mucho que hacer.
Un ejemplo: Llamar a las cosas por su nombre ayuda. Un asesinato es exactamente eso… un asesinato y si no se emplea el término exacto y se recurre a eufemismos para que suene mejor y dulcificarlo ("personas a las que se les ha privado del derecho a la vida")…. eso no ayuda
Adornar o falsear la historia tampoco ayuda… Es imprescindible que la sociedad tome conciencia de la gravedad del problema y abrace con toda la fuerza posible el lema de las VT: "Justicia, verdad, memoria". Y de las 3 palabras hay una que es el núcleo de todo: JUSTICIA es la gran palabra que lo resume todo. Y sigue pendiente…
Decir que "ya está" es una vileza interesada
Javier Urquizu Aranaga
Psicólogo Psicoterapeuta
Hijo de Jose Mª Urquizu Goyogana (asesinado por ETA el 13 de Sept de 1980)
