Menú
Enrique Navarro

Ilyin: el loco ideólogo de Putin

Putin predijo que Euroasia superaría a la Unión Europea y que uniría a sus miembros en una entidad más grande desde Lisboa a Vladivostok.

Putin predijo que Euroasia superaría a la Unión Europea y que uniría a sus miembros en una entidad más grande desde Lisboa a Vladivostok.
Ivan Ilyin y Vladimir Putin | Wikimedia | EFE

En las últimas semanas asistimos a una discusión sobre el estado mental de Putin y la naturaleza de su ideología. La buena noticia es que Putin no actúa por impulsos, la mala es que su ideología es tan aberrante como Mein kampf o el Libro Rojo.

El gran ideólogo del fascismo cristiano ruso, Ivan Ilyin, nació en 1883 y murió olvidado en Suiza en 1954, después de haber escrito numerosos libros que cayeron casi en el olvido. Cuando Putin personalmente se encargó de trasladar sus restos a un monasterio que había acogido a la sede de la seguridad de los soviets, donde se hallan los restos de miles de víctimas, nació el neofascismo cristiano ruso, inspiración ideológica de Rusia Unida y su ideología oficial nacional-conservadora y de su presidente, Vladimir Putin.

La filosofía de Ilyin influyó en numerosos jerarcas postcomunistas, aunque su mayor defensor y propagador fue el intelectual y director de cine Nikita Mijailov, hijo del autor del himno de la Unión Soviética, que escribió numerosos artículos sobre Ilyin y que tuvo la idea de transferir los restos de éste al monasterio de Donskoy, donde el filosofo había soñado tener su última morada. En 2005, se reeditaron en Rusia en veintitrés volúmenes sus obras, por si tienen interés en conocer más de cerca al personaje y disponen de tiempo.

Después de abandonar la Unión Soviética, afirmaba que la única esperanza de Dios era que una nación justa siguiera a un líder hacia la totalidad política y que comenzara la redención del mundo, estaba claro a qué se refiere. Podría ser un digno heredero de Rasputín, ya que combinaba a Freud, que entendió que el problema de Rusia era de inocencia sexual, con Hitler y con el fascismo italiano, vamos una mezcla explosiva. Terminada la guerra, se distanció del fascismo y regresó al autoritarismo de corte comunista como única solución a los eternos problemas de Rusia.

Ilyin estaba convencido de que los gestos audaces de líderes audaces podrían comenzar a deshacer el carácter defectuoso de la existencia. En su aberrante visión, las democracias habilitaron al comunismo y por eso deben ser destruidas. La única forma de erradicar el mal es eliminar a la clase media y destruir la sociedad civil transformándola en una conciencia de sumisión nacional, y de ahí lo poco que le preocupan a Putin las sanciones, van a ser el instrumento para eliminar a eses gran enemigo de los totalitarismos que es la clase media. Por esa razón, Ilyin abogaba por la destrucción de los gobiernos soviéticos y europeos y veía en la llegada del fascismo ese "acto de salvación" . Incluso abrazó el antisemitismo que Putin destila cada vez que habla de Zelenski, alabando la idea judeo-bolchevique que unía ideológicamente a los blancos que se opusieron a la revolución con los nazis y que no nos es tan desconocida. El pobre y religioso, casi esotérico, campesinado ruso vio en los judíos el enemigo que los alejaba de Dios.

Siempre aludía a la "inocente Rusia", rodeada por enemigos que pretenden aprovecharse de ella, sin que ésta tenga al líder que la haga respetar entre sus expoliadores. Para Ilyin, el mundo era corrupto y necesitaba de una redención y es la Rusia inmaculada la llamada a satisfacer esa necesidad divina. Argumentaba que Rusia siempre estuvo sometida a un bloqueo continental lo que le había obligado a una autodefensa inaceptable. Es decir, se vinculaba a la misma falacia creada por el partido comunista de que el mundo deseaba que el estado soviético pereciera.

Según interpretaba Putin a Ilyin en un discurso de 2014, "Libertad para Rusia no significaba libertad para los individuos sino que los rusos se sientan libres de formar parte de un todo", obviamente es un concepto de libertad muy ajeno al nuestro. Con el control de los medios arrebatados a los oligarcas, Putin comenzó en 2005 a rehabilitar a Ilyin como su ideólogo, y Vladisvav Surkov, el Goebbels de Putin, encontró una ideología con la que bombardear al pueblo ruso y a sus agentes por todo el mundo. Medvédev, llamado a perpetuar a Putin cuando éste sea presidente emérito en 2036, siempre exhorta a los jóvenes a leer a Ilyin como si fuera el Libro Rojo y es citado continuamente por las autoridades religiosas y políticas.

Hace años conversaba en Moscú con un alto funcionario comunista de la Unión Soviética, ya mayor. Explicaba que el fracaso de la URSS se debía a que Dios les había castigado y que por eso entonces todos los comunistas iban a misa diaria. Putin representaba los modos y maneras del estalinismo, pero ahora abrazados a una causa nacional ortodoxa. Putin, me decía, había conseguido por fin una ideología autoritaria que superaba a los dos extremos, con el objetivo final de la supremacía del estado sobre el individuo, y por eso encuentra adeptos en los populismos de todo signo, sin reparar en medios.

Cuando Putin regresó en 2012, decidió llevar a cabo el mandato de Ilyin, acabando con el estado de derecho para perpetuarse en el poder y culminar la obra sin las ataduras que debían destruirse para evitar la corrupción del inocente pueblo ruso. Cuando Rusia invadió Crimea, fueron enviados a todos los gobernadores y pro-rusos de Ucrania "las tareas de Rusia" obra del Carl Schmidt de Putin. Hoy aprovechando el viento de la guerra está convirtiendo a Rusia en una autocracia.

¿Y qué ha dicho Putin basándose en los libros de Ilyin? En Izvestia, en octubre de 2011, anunció la creación de una Unión Euroasiática que reuniría a los estados que no habían logrado establecer el estado de derecho, entendido a su manera (Ucrania). En 2012, citando también a Ilyin, señalaba la necesaria integración entre estados, más como una virtud que como un logro. En Moskovskie Novosti, en febrero de 2012, Putin expuso las conclusiones políticas " Rusia como organismo espiritual no sólo sirve a las naciones ortodoxas, y no sólo a las naciones de Euroasia, sino a todas las naciones del mundo. Esta es su confluencia con el comunismo soviético, no se trata solo de la hegemonía sobre Europa, sino que tiene una visión mundial, de transformar el mundo como si él fuera el gran arquitecto.

Putin predijo que Euroasia superaría a la Unión Europea y que uniría a sus miembros en una entidad más grande desde Lisboa a Vladivostok". Así que aquí tenemos definidas las ambiciones de Putin sobre Europa.

Según un artículo publicado en 2018, de Timothy Sneider, biógrafo de Putin en su obra The Road to Unfreedom: Russia, Europe, America (Penguin 2018) del que he tomado muchas referencias, la campaña rusa contra la decadencia de la Unión Europea iniciada en 2013, está de acuerdo con esta cosmovisión de Ilyin. Éste personaje tildó a Rusia de homosexual, posteriormente se sometió a terapia de psicoanálisis con su novia y luego culpó a Dios. A su vez, Putin primero se sometió a fotos cazando o con pieles, luego se divorció de su esposa y finalmente culpó a la Unión Europea por la homosexualidad rusa que él está llamado a erradicar.

Temas

En Internacional

    0
    comentarios