L. D. / EFE.-
Entre los inmigrantes, que fueron llevados en un transbordador a la cercana isla de Samos, hay cuatro mujeres y dos niños, y todos ellos habían partido desde la costas occidentales de Turquía con la ayuda de traficantes de personas. Quienes se dedican a esa actividad ilegal cobran una media de 2.000 dólares a cada pasajero por acercarle a alguna isla griega o a la Grecia continental.
El Ministerio de Marina Mercante griego prepara un plan para aumentar la vigilancia e intentar frenar la posible entrada de unos 15.000 refugiados, que están en las costas de Asia Menor a la espera de alcanzar territorio europeo, temerosos de la represalia de EEUU contra algún país de esa región por los atentados del pasado día 11.
La diplomacia de Grecia también ha avanzado hacia un acuerdo con la vecina Turquía para abreviar los trámites de extradición de quienes llegan de forma ilegal a sus costas.
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El Ministerio de Marina Mercante griego prepara un plan para aumentar la vigilancia e intentar frenar la posible entrada de unos 15.000 refugiados, que están en las costas de Asia Menor a la espera de alcanzar territorio europeo, temerosos de la represalia de EEUU contra algún país de esa región por los atentados del pasado día 11.
La diplomacia de Grecia también ha avanzado hacia un acuerdo con la vecina Turquía para abreviar los trámites de extradición de quienes llegan de forma ilegal a sus costas.
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