Lamento lo ocurrido y pido para que se aclare y supere la tragedia cuanto antes, y sobre todo por el P. Angel y todos sus colaboradores que lo tienen que estar pasando muy mal.
Un abrazo.
Es muy lamentable que tres niños hayan muerto de esa forma. Lo lamento sinceramente.
Dicho esto, me parece dentro de lo posible que la monitora presuntamente haya asfixiado a los menores. Cualquier persona con suficiente fuerza podría hacerlo.
Pero lo que no me acaba de entrar en la mollera es que la mencionada monitora haya necesitado asistencia sanitaria por cortes en la cabeza y muñeca. ¿Se autolesionó? ¿Por qué estaba inconsciente?
No veo que la noticia aclare mucha cosa al respecto.
Y en cuanto al Padre Ángel, coincido con el comentario de Italia34. Nunca me ha gustado ver a este sacerdote vestido como un gerente de cualquier empresa. En el fondo creo que eso es lo que es por muy de alabar que sea su trabajo. Hay muchos seglares que harían muy bien ese trabajo. Esta Iglesia, a la que pertenezco muy gustosamente, es todavía demasiado clerical. Lo digo porque da la impresión de que muchos curas todavía no se fían de la capacidad de sus fieles.
Cada vez se leen más chorradas entre los comentarios. No creo que haga falta indicar a cuál me refiero en este caso.
Resulta muy dificil arriesgarse a una calificación de este terrible suceso. Por supuesto que si la monitora está implicada y es responsable es el momento de hacer una investigación sobre las cualidades que debe reunir una persona que se dedica a cuidar este tipo de niños. He trabajado muchos años como responsable nocturno en un centro de menores (normales, si así pueden calificarse) y de vez en cuando surgen situaciones críticas que nacen de la especial situación sicológica y familiar de estos niños. No me aventuraría a "juzgar" y menos a "condenar" a esta monitora. Tal vez sea el momento de exigir más preparación y estabilidad mental y sicológica a las personas que se dedican a este menester. Pienso que la edad es un factor importante porque puede demostrar una trayectoria e idoneidad. En esto no se puede improvisar y la experiencia es fundamental. Es triste y lamentable, pero hay que aprender de hechos como éste.
Era un buen momento para que el Padre Angel dejara la chaqueta y la corbata de colores y ponerse una sotana o un cleriman, vamos como se visten los sacerdotes.
Estoy aburrida de leer casos en los que hay muertes en centros por culpa de enfermeras y monitoras con problemas de salud¿pero es que no se molestan en hacer un examen exaustivo para ver si los monitores están bien de la cabeza y más con pacientes tan delicados y que necesitan tanta atención?.
¿No hay una ley que regule la contratación de personal al cargo de menores, y aún menos de menores con minusvalías, en cualquier tipo de centro o institución?
Si es mujer = acto de locura, no sabía lo que hacía, y si me apuráis, es que es mujer y hay que entenderla, o sea, ni cárcel siquiera, ¿a qué mente retorcida se le puede ocurrir tal aberración?
Si es hombre = asesino despiadado que merece la pena de muerte.
Las cosillas de la igual da que nos quieren implantar en el coco las feminazis y los paganfantas que les bailan el agua, pero ya no cuela.
Lamento lo ocurrido y pido para que se aclare y supere la tragedia cuanto antes, y sobre todo por el P. Angel y todos sus colaboradores que lo tienen que estar pasando muy mal.
Un abrazo.