La viagra, también llamada sildenafilo, actualmente es un medicamento multifacético al que se le atribuyen propiedades terapéuticas frente a enfermedades como el Alzheimer o el aumento del rendimiento deportivo. ¿Por qué se dice que puede mejorar el rendimiento deportivo? La clave está en su efecto vasodilatador, ya que produce una intensa dilatación de los vasos sanguíneos. Por eso, de vez en cuando se pone de moda como complemento para batir marcas en competición. Pero en realidad, ¿en qué casos se aconseja tomar viagra? La viagra está indicada en casos de hombres adultos con disfunción eréctil, que es la incapacidad para obtener o mantener una erección suficiente para una actividad sexual satisfactoria, y también se utiliza en pacientes con hipertensión arterial pulmonar, en los que mejora la respiración.
Habitualmente la viagra es conocida por el tratamiento de la disfunción eréctil, recordemos que aumenta el flujo sanguíneo en el cuerpo. Quizá por ese motivo, en los últimos años ha surgido con fuerza la duda sobre si mejoraría el rendimiento deportivo y en qué casos sucedería este hecho. Aunque su uso en este contexto no está aprobado ni ampliamente estudiado, hay algunas hipótesis y estudios que exploran esta posibilidad. ¿Por qué podría funcionar?
El sildenafilo actúa relajando los vasos sanguíneos, lo que podría tener un impacto positivo en la oxigenación muscular y el rendimiento físico. Por ello, en deportes de alta intensidad o en condiciones donde el oxígeno es limitado, algunos investigadores sugieren que la Viagra podría ayudar a mejorar el flujo de oxígeno hacia los músculos, reduciendo la fatiga y aumentando la resistencia.
Pero todavía los resultados no son concluyentes. Aunque es cierto que algunos estudios han mostrado mejoras marginales en el rendimiento en ciertas condiciones específicas, como la hipoxia, otros no han encontrado diferencias significativas en comparación con un placebo. Además, el uso de sildenafilo como potenciador deportivo plantea riesgos, incluyendo efectos secundarios como mareos, dolores de cabeza, alteraciones visuales y problemas cardiovasculares.
¿Qué dice la ciencia sobre la viagra y el deporte?
- Mejora del flujo de oxígeno
Un estudio del año 2006 midió el efecto de la viagra en ciclistas bajo condiciones normales y en condiciones simuladas de gran altitud. Los resultados fueron que, en condiciones normales, no tenía un impacto significativo. Pero, en condiciones de gran altitud, el rendimiento y otros marcadores biométricos mejoraron significativamente. Por ejemplo, el tiempo necesario para completar un trazado se redujo en un 15 % en general. Sin embargo, un estudio similar más reciente, del 2019, no encontró ninguna mejora significativa en el rendimiento después de tomar viagra, incluso a gran altura.
- Mejoras a nivel musculo esquelético
En referencia a los cambios que la viagra pudiera ejercer a nivel del músculo esquelético se encuentra un estudio realizado en 11 hombres sanos. Tras el tratamiento, se llegó a la conclusión de que había mejora de la contracción del músculo esquelético con respecto al placebo. Además se demostró que el aumento de la síntesis de proteínas es semejante al que se observa tras la administración de 100-200 mg/semanales de testosterona.
- Mejoras hormonales
Siguiendo el hilo de la testosterona, un estudio del año 2013, llegó a la conclusión de que el uso de viagra contribuye claramente al aumento de los niveles séricos de testosterona por efecto directo, pero además genera un aumento de la Hormona Luteinizante (LH) sobre las células de Leydig, de forma indirecta. Eso sí, este estudio fue realizado a hombres con disfunción eréctil.
- Efectos cardioprotectores
Para examinar los posibles beneficios de los medicamentos tipo viagra relacionados con el corazón, se han obtenido datos de registros médicos electrónicos de más de 23.000 hombres diagnosticados con disfunción eréctil a quienes se les recetó uno de estos medicamentos. Los compararon con un grupo similar de más de 48.000 hombres con disfunción eréctil a quienes no se les recetó uno de estos fármacos durante el período de estudio 2006-2020.
Los hombres que tomaron el fármaco, en comparación con los que no lo hicieron, tuvieron: un 13% menos de eventos cardiovasculares adversos importantes, como ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares o insuficiencia cardíaca. Un 39% menos tasa de muerte por enfermedad cardiovascular. Y un 25% menos tasa de muerte por cualquier causa.
Pero no solo eso sino que los beneficios relacionados con el corazón de estos medicamentos también se observaron en hombres a los que no se les había diagnosticado enfermedad de las arterias coronarias, pero que tenían factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, incluida la diabetes tipo 2.
Rendimiento en lugares con falta de oxígeno
Algunos culturistas y atletas toman viagra de forma crónica y en dosis muy bajas para mejorar su rendimiento gracias a ese efecto vasodilatador. No obstante, en el mercado existen muchos suplementos que actúan de forma similar produciendo vasodilatación, como el óxido nítrico. Entonces hay que plantearse si la estrategia de la viagra sirve realmente para el propósito inicial. En principio podría parecer que sí ya que el uso de viagra podría mejorar el rendimiento deportivo al aumentar el flujo sanguíneo, lo que supondría la llegada de más oxígeno y nutrientes a los músculos. Este efecto sería especialmente útil para el ejercicio físico de larga duración, de resistencia o ultrarresistencia.
No obstante, se han publicado algunos estudios que han comprobado la posible utilidad de la viagra en una situación muy concreta: en condiciones de hipoxia, como las que se dan en altitudes en torno a los 1.800-2.000 metros. En esos casos, un estudio constató un ligero aumento de la capacidad aeróbica, sin embargo, en muchos otros trabajos no se ha observado ningún beneficio significativo. Por ejemplo, una revisión publicada en 2019 confirmó que el sildenafilo reduce la presión arterial pulmonar, pero el efecto sobre otras variables relacionadas con un mejor estatus deportivo es modesto y, lo que es más relevante, no tiene ningún efecto en el rendimiento deportivo.
Estrategias para mejorar el rendimiento deportivo
Por lo tanto, la administración de viagra podría tener cierto sentido en la práctica de ejercicio en altura y para deportes de resistencia, aunque considera que existen estrategias muchísimo más eficaces. Obviamente está desaconsejado el uso de viagra sin prescripción médica para propósitos ajenos al acto sexual. El motivo es que, además de tener poca eficacia puede tener efectos secundarios como dolor de cabeza o problemas digestivos.
Entonces, ¿cuáles serían los consejos para mejorar el rendimiento deportivo? Hay que saber que en realidad la mejora del rendimiento se aborda muchas veces desde un mal enfoque. El problema no es cómo rindo más, sino cómo me recupero. Recordemos que si no entreno adecuadamente, no como bien y no recupero, ya puedo tomar 1.000 suplementos, que no me servirán de nada. Generalmente, el entrenamiento específico de cada disciplina deportiva es fundamental, pero también hay que seguir un estilo de vida que favorezca un mejor rendimiento. Los factores que ejercen una influencia más decisiva son:
- El sueño: Un sueño insuficiente o de mala calidad puede afectar negativamente a las habilidades técnicas y la función cognitiva de un atleta, a la recuperación de lesiones y la readaptación deportiva, así como a su salud cardiovascular y metabólica.
- El estrés: Los atletas que aprenden a gestionar la presión que se ejerce sobre ellos y controlar el estrés y la ansiedad son los que alcanzan mayores tasas de éxito.
- La nutrición: Lo importante es no descuidar ninguno de los componentes básicos de una alimentación saludable que son los macronutrientes (proteínas, grasas e hidratos de carbono), los micronutrientes (vitaminas y minerales) y los valores energéticos.
- La fatiga y el cansancio: Es crucial evitar la fatiga y el cansancio. Encontrar un equilibrio entre la actividad física y la recuperación es la clave para un rendimiento deportivo óptimo.