En España, hay 9.280.821 perros de compañía, dos perros por cada niño menor de 15 años. Actualmente, el 43% de los hogares españoles tiene una mascota, de las cuales el 36% son perros o gatos. Estos datos reflejan la popularidad de los perros como mascotas, que cada año aumenta.
Según la Ley 7/2023 de Protección de los Derechos y Bienestar de los Animales, en vigor desde septiembre de 2023, se prohíbe dejar a un perro solo durante más de 24 horas consecutivas, considerándose como una excepción y una medida que no debe ser habitual. Según los expertos, para garantizar el bienestar del animal y evitar problemas de comportamiento, un perro no debe permanecer más de ocho horas al día solo. De hecho, lo más recomendable es que el perro pase un máximo de cuatro horas sin estar acompañado pero, ¿esto es compatible con muchos trabajos?
La mayoría de oficios hoy en día requieren de estar 10 horas o más fuera de casa –8 horas de jornada laboral más el tiempo de desplazamiento–. Por ello, muchas personas estarían dejando a su mascota en soledad mucho más tiempo del recomendado. Para evitar esta situación, cada vez más empresas, como Google, Amazon o Nestlé, están adoptando políticas dog-friendly que permiten a los empleados acudir al trabajo acompañados de sus perros, promoviendo así entornos laborales más humanos y respetuosos con el bienestar animal.
Sin embargo, no todas las empresas permiten llevar mascotas al trabajo, ya que esto depende de la política de cada compañía. Aun así, cada vez son más las que apuestan por un entorno pet-friendly, una tendencia que, según la Real Sociedad Canina de España (RSCE), responde al aumento de perros en los hogares españoles tras la pandemia, un fenómeno conocido como pet-boom.
Los perros en los espacios públicos
Desde la Real Sociedad Canina de España, han trasladado a este medio su apoyo a la ampliación de espacios públicos que permitan la presencia de perros, con el fin de promover una convivencia responsable y adaptada a las necesidades de estas mascotas.
En esta misma línea, han subrayado la importancia de fomentar una tenencia responsable, facilitando el acceso de los perros a más entornos, siempre que se garantice su bienestar y seguridad. "Por ejemplo, dejar a un perro atado sin vigilancia en la puerta de un establecimiento se considera una infracción leve según la nueva ley. Y es lógico que un perro debe tener vigilancia", han afirmado.
No obstante, según la Asociación de Trabajadores Autónomos, está prohibido el acceso de cualquier animal a las zonas de los establecimientos de comercio al por menor donde se preparen, manipulen o almacenen alimentos; una interpretación que no se ajusta del todo a lo que establece la Ley de Bienestar Animal.
Por esta razón, desde la RSCE han pedido más espacios dog-friendly en España, con el objetivo de promover una convivencia armoniosa entre las mascotas y los humanos.
Beneficios de llevar tu perro al trabajo
Asimismo, según la RSCE han explicado los beneficios de llevar a tu mascota al trabajo.
- Reducción de estrés: según la asociación, disminuyen los niveles de estrés entre los empleados y hay menor ausentismo laboral por contingencias relacionadas con el estrés. También beneficia al propio perro, ya que no se queda solo en casa.
- Mejora el ambiente laboral: aumenta la empatía y la interacción social, fomenta un ambiente más distendido y relajado y derriba barreras personales entre los empleados.
- Incremento de la productividad y la creatividad de los empleados: las pausas para cuidar al perro mejoran la concentración y reducen la fatiga visual, repercutiendo en un aumento de la productividad y la creatividad.
- Reducción de preocupaciones personales: elimina la incertidumbre sobre el bienestar y el estado de la mascota durante la jornada laboral. Esto es especialmente beneficioso después de períodos vacacionales, evitando que el perro sufra ansiedad o estrés postraumático.
- Fomento de la conciliación laboral y emocional: llevar al perro a la oficina permite a los empleados cuidar de sus mascotas sin tener que sacrificar tiempo laboral o calidad de vida.
- Beneficio colectivo: el bienestar del dueño y del perro influye positivamente en el entorno de trabajo, ya que la presencia de un perro cariñoso y bien educado aporta beneficios para todos los compañeros.