Los ratones son animales que transmiten enfermedades a través de sus heces, asimismo, pueden atraer otras plagas que perjudican el bienestar y equilibrio del jardín. En la actualidad, existen innumerables pesticidas, trampas o incluso venenos para acabar con ello, pero la mayoría de la gente suele optar por un remedio más natural y menos invasivo con el medio ambiente.
Los posibles daños que ejercen en el jardín
Es fácil saber sí hay ratones en el jardín, ya que suelen dejar un evidente rastro de deposiciones, pero sí esto no es suficiente para descubrir a este pequeño intruso, hay otras señales que te harán darte cuenta.
- Daños en las raíces y semillas de las plantas: los ratones suelen desenterrar las semillas de las plantas, ya que es uno de los nutrientes principales de su alimentación. Asimismo, en el transcurso de este ejercicio, pueden dañar las raíces, lo cual provoca que los brotes nuevos se marchiten y el crecimiento se ralentice o se frene, generando que la planta se debilite.
- Creación de madrigueras: suelen escarbar bajo la tierra para crear túneles subterráneos y nidos. Esto, a largo plazo, afecta al suelo y al cultivo.
- Presencia de otras plagas: los restos de comida de estos roedores pueden atraer a otros insectos como las moscas y las cucarachas. Asimismo, su mera presencia puede hacer que los depredadores (serpientes y gatos callejeros) sean atraídos.
- Sistemas de riego o cableado rotos: los ratones son conocidos por roer cables, por ello, en los jardines con riego automático o luces decorativas pueden generar fugas de agua o cortacircuitos.
Otro gran problema que no se percibe a simple vista son las enfermedades que pueden provocar en los seres vivos. La orina y las heces pueden ser foco de hantavirus, leptospirosis y salmonella. Además, pueden contaminar cosechas enteras sin ni siquiera notarlo, por ello, es vital erradicar esta plaga.
Las plantas repelo a los ratones
La mejor forma de evitar los daños que provoca una plaga de ratones es prevenir desde un inicio su presencia, para ello, una buena alternativa a los pesticidas y trampas para ratones, son las hierbas aromáticas o las especies con un olor natural que los repele. Algunas de las opciones más comunes son:
- La menta: es un ingrediente muy útil en la cocina, que sirve para sazonar innumerables platos, pero lo que mucha gente no sabe es que también sirve para mantener alejados a los ratones, ya que el olor que desprende los repele.
- La lavanda: se utiliza a menudo para elaborar jabones naturales por su agradable aroma. Sin embargo, los roedores no perciben este olor de la misma manera y suelen huir de esta especie.
- El ajenjo: esta especie poco conocida es un remedio natural para terminar con múltiples plagas. Su peculiar olor y su intenso sabor son claves para alejar diferentes especies.
- La ruda: de la misma manera que el ajenjo, este tipo de planta cuenta con un fuerte aroma que repele a muchos tipos de plagas.
- La caléndula: conocida generalmente por su función medicinal, pero también es ideal para repeler especies que destruyen el jardín.