
LD (Agencias) El mimso día que hizo pública su sanción al juez Tirado por el caso Mari Luz, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) impuso al titular del juzgado de lo Social número 3 de Toledo, Ángel Luis del Olmo, una multa de 5.000 euros por abuso de autoridad y desconsideración con los funcionarios y otra de 2.500 euros por multar de forma injustificada al secretario judicial, que le acusó de falta de higiente al tener halitosis.
La Comisión Disciplinaria del CGPJ ha tomado esta decisión por unanimidad y de acuerdo con la propuesta del instructor del expediente que le fue abierto al juez por el órgano de gobierno de los jueces, según han informado fuentes del Consejo. Según ha publicado "La Razón", este magistrado acostumbraba a orinar en los lavabos del despacho con la puerta abierta mientras dictaba resoluciones, y los funcionarios, a quienes trataba "como si no fueran personas", se quejaban de su "hedor corporal".
En declaraciones a Europa Press, Del Olmo ha asegurado que se ha producido una resolución "que no conozco y que se ha filtrado antes de que lo sepa el interesado, que soy yo". De esta manera, el juez negó reiteradamente que haya cometido abuso de autoridad y multar de forma injustificada al secretario judicial. Angel Luis del Olmo afirmó que los hechos que se le atribuyen "están probados de una manera muy débil". En primer lugar, "porque los denunciantes no pueden ser testigos de la denuncia, ya que ni se multó al secretario, sólo se le impuso una obligación de no hacer, con advertencia de multa".
En declaraciones a Europa Press, Del Olmo ha asegurado que se ha producido una resolución "que no conozco y que se ha filtrado antes de que lo sepa el interesado, que soy yo". De esta manera, el juez negó reiteradamente que haya cometido abuso de autoridad y multar de forma injustificada al secretario judicial. Angel Luis del Olmo afirmó que los hechos que se le atribuyen "están probados de una manera muy débil". En primer lugar, "porque los denunciantes no pueden ser testigos de la denuncia, ya que ni se multó al secretario, sólo se le impuso una obligación de no hacer, con advertencia de multa".
El magistrado negó que pronunciara frases como que "la ley soy yo" o que "aquí se hace lo que yo digo", así como la acusación de que tenga halitosis "como se ha tratado de argumentar", concluyó.
