L D (EFE) El inspector de investigación de los Mossos d´Esquadra en Barcelona, Josep Lluís Trapero, ha informado este miércoles, con la limitación impuesta por el juez, éste ha prohibido a la Policía autonómica dar información de algunos aspectos de la detención, de que probablemente la homicida no será puesta a disposición judicial hasta el viernes. La detenida, casada y con dos hijos, fue reconocida por un vecino de Santa Andreu. Este dato, junto con el deje gallego que supuestamente tendría, aceleraron la detención de la presunta "asesina de ancianas", durante la pasada noche del martes. Una lesión cutánea en la mano derecha de la acusada, descrita por alguna de sus víctimas, también ha ayudado a su identificación y detención.
La arrestada estaba siendo buscada desde la segunda agresión, a mediados de junio, porque ya se le relacionó con el primer asesinato de una anciana cometido el 10 de junio. En Sant Andreu obtuvieron un testimonio de alguien que reconoció a la mujer e indicó su posible afición al juego. "El conocer su interés por un determinado tipo de establecimiento ha sido un dato muy relevante", ha reconocido Trapero, que ha informado de que los agentes llegaron a controlar un domicilio de la sospechosa que resultó antiguo ya que tenía una nueva vivienda.
El inspector ha revelado que "teníamos la sensación de estar trabajando contrarreloj, sobre todo después de las dos muertes del viernes y el domingo pasado". Asimismo, ha confesado que más de 300 agentes han trabajado "con angustia", aliviada tras la detención, que ha propiciado un cierto "orgullo como mossos, aunque cuando hay víctimas uno nunca puede sentirse satisfecho ni feliz". "El mal sueño se ha acabado", concluyó.
Trabajo de campo
Trapero ha explicado, con las limitaciones impuestas por el juez, que a la investigación que inició el grupo de homicidios se sumó luego el grupo de atracos dado que el "modus operandi" de ataque a las ancianas parecía ser el mismo y que inicialmente abrieron dos líneas de búsqueda, una en Montcada i Reixac y la otra en Barcelona, donde controlaron sobre todo los medios de transporte para localizar a la sospechosa. Pero, cuando del 18 al 25 de junio se produjeron cuatro nuevas agresiones, la Policía centró su investigación sólo en Barcelona, "con un extenso trabajo de campo" especialmente en Sant Andreu y Eixample.
Acerca del móvil de la asesina en serie, el inspector no ha querido pronunciarse, "es pronto todavía", ha aconsejado; aunque ha apuntado que en algunos casos la autora se había llevado alguna joya y dinero en metálico, mientras que en otros no. El trabajo de campo de los mossos ha incluido enseñar la fotografía de la sospechosa a todos los porteros de fincas de Sant Andreu y el Eixample, así como a propietarios de bares, restaurantes y otros establecimientos.
Autorización para registrar
Autorización para registrar
Los Mossos d'Esquadra han solicitado durante la mañana del miércoles autorización judicial para registrar el domicilio de Remedios S.S. Ésta no ha sido interrogada todavía, a la espera de que los investigadores puedan practicar el registro de su vivienda, situada en el norte de Barcelona, en una zona limítrofe entre Nou Barris, Sant Martí y Sant Andreu. Los investigadores esperan interrogarle para poder preguntarle acerca de los objetos que puedan encontrar en su casa.
A la espera de conclusiones, Remedios S.S., que cumplirá 49 años el próximo día 22, podría ser también imputada por una cuarta muerte si se confirma que la víctima, una anciana de 84 años que falleció el pasado 27 de junio en su casa de la calle Enric Granados de Barcelona aparentemente por una parada cardiorrespiratorial, recibió la visita de la presunta asesina.
Los investigadores están repasando todas las agresiones a ancianas cometidas por una mujer y denunciadas en los últimos meses para comprobar si coinciden los "modus operandi". La presunta asesina de ancianas siempre actuaba de la misma manera, ganándose la confianza de sus víctimas, mujeres de más de 70 años, en parques, iglesias o mercados para acompañarlas a sus casas tras conocer que vivían solas.
La última agresión que se le atribuye la cometió el pasado lunes por la noche en un piso de la calle Urgell de Barcelona, donde agredió a una anciana de 84 años a la que dejó inconsciente, posiblemente pensando que la había matado. En este último caso la presunta homicida llamó al telefonillo de su víctima y la engañó diciéndole que traía una carta
A la espera de conclusiones, Remedios S.S., que cumplirá 49 años el próximo día 22, podría ser también imputada por una cuarta muerte si se confirma que la víctima, una anciana de 84 años que falleció el pasado 27 de junio en su casa de la calle Enric Granados de Barcelona aparentemente por una parada cardiorrespiratorial, recibió la visita de la presunta asesina.
Los investigadores están repasando todas las agresiones a ancianas cometidas por una mujer y denunciadas en los últimos meses para comprobar si coinciden los "modus operandi". La presunta asesina de ancianas siempre actuaba de la misma manera, ganándose la confianza de sus víctimas, mujeres de más de 70 años, en parques, iglesias o mercados para acompañarlas a sus casas tras conocer que vivían solas.
La última agresión que se le atribuye la cometió el pasado lunes por la noche en un piso de la calle Urgell de Barcelona, donde agredió a una anciana de 84 años a la que dejó inconsciente, posiblemente pensando que la había matado. En este último caso la presunta homicida llamó al telefonillo de su víctima y la engañó diciéndole que traía una carta