L D (EFE) La fuerte tormenta de granizo que descargó en la noche de este sábado sobre Castroponce (Valladolid) causó destrozos y daños, además de en tejados de viviendas y lunas de coches, en parte del área superior de la Iglesia, cuya construcción se calcula en el siglo XVII. El subdelegado del Gobierno en Valladolid, Cecilio Vadillo, explicó que la intensa tormenta de granizo que cayó sobre las 21,00 horas afectó a tejados de uralita, a persianas, ventanas, parabrisas y lunas traseras de vehículos, además de la parte superior del templo de la localidad.
Además, las tormentas también se registraron en otros puntos de la provincia, como ocurrió en Villanubla, donde el granizo descargó mientras se celebraba la Feria de Oficios Tradicionales en la calle mayor de la localidad.
Por otra parte, la tormenta que cayó a primera hora de la tarde de este domingo sobre Oviedo, con granizo y fuertes ráfagas de viento, ha provocado inundaciones en la catedral de Oviedo y causado diversos incidentes en el resto de la ciudad. El fuerte viento que sopló sobre las 13.00 horas, cuando caía sobre la ciudad una cortina de granizo, se llevó por delante algunas terrazas del centro de la ciudad y arrastró sombrillas, mesas y sillas mientras sus ocupantes corrían a refugiarse en portales.
En la catedral, la tormenta ya afectó el desarrollo de la misa que se celebraba a las 13.00 horas, cuando decenas de feligreses cambiaron de lugar en la nave central del templo a causa del ruido que producía el granizo al caer sobre las vidrieras. Posteriormente, se comprobó que la tormenta, que duró unos 12 minutos, inundó la sacristía y la capilla del Rey Casto.
Además, las tormentas también se registraron en otros puntos de la provincia, como ocurrió en Villanubla, donde el granizo descargó mientras se celebraba la Feria de Oficios Tradicionales en la calle mayor de la localidad.
Por otra parte, la tormenta que cayó a primera hora de la tarde de este domingo sobre Oviedo, con granizo y fuertes ráfagas de viento, ha provocado inundaciones en la catedral de Oviedo y causado diversos incidentes en el resto de la ciudad. El fuerte viento que sopló sobre las 13.00 horas, cuando caía sobre la ciudad una cortina de granizo, se llevó por delante algunas terrazas del centro de la ciudad y arrastró sombrillas, mesas y sillas mientras sus ocupantes corrían a refugiarse en portales.
En la catedral, la tormenta ya afectó el desarrollo de la misa que se celebraba a las 13.00 horas, cuando decenas de feligreses cambiaron de lugar en la nave central del templo a causa del ruido que producía el granizo al caer sobre las vidrieras. Posteriormente, se comprobó que la tormenta, que duró unos 12 minutos, inundó la sacristía y la capilla del Rey Casto.
