LD (Europa Press) El presidente del Gobierno dice apostar por un modelo de integración que pase por la "multiculturalidad" y el "entendimiento", frente a la "imposición" o los "discursos de cruzada" del PP y advirtió que "un estado democrático debe mantener el orden civil, los derechos de ciudadanía y garantizar la libertad religiosa".
En este sentido, afirma estar sorprendido por "las prácticas y la cultura del Ramadán", aunque lo comparó con la extrañeza que pueden provocar las procesiones de Semana Santa en los países musulmanes.
Por ello, afirmó que el líder del PP, Mariano Rajoy, ha hecho "el ridículo" con su propuesta de contrato social a inmigrantes y su rechazo al velo porque "cuando llegó a Melilla se ha dado cuenta de que hay españolas" que también lo utilizan. "Ha habido pocos problemas y se han resuelto", apuntó.
Por otra parte, en lo que se refiere a prácticas como la poligamia y la ablación, Zapatero recordó que son consideradas delito y se persiguen "porque atenta contra derechos humanos y la integridad (física)". "Hay pautas culturales que no resultan extrañas a nuestra cultura, pero la manera de hacer convivir eso es que primen las leyes civiles, basadas en derechos humanos, el respeto a la ciudadanía y la libertad religiosa en un marco común", aseveró.
Una "tímida" caída del desempleo de los inmigrantes
El presidente también espetó que el desempleo de los extranjeros "crece de una manera menos tímida", a raíz de la actual coyuntura económica, por lo que "de manera natural" disminuirá el flujo de inmigrantes irregulares que vienen a España con contrato en origen.
En cualquier caso, defendió la necesidad de la mano de obra inmigrante en España, dado que cubren sectores donde no trabajan los españoles. Además, recalcó que las aportaciones de los extranjeros a la Seguridad Social, vía cotizaciones, ha permitido ampliar las pensiones a un millón de españoles.