
Las autoridades japonesas han detenido a Masaki Eguchi, un joven de 21 años, como principal sospechoso del asesinato de Waka Kato, una adolescente de 16 años cuyo cuerpo fue hallado el lunes dentro de un armario en su vivienda en Ichinomiya, prefectura de Aichi. Ambos se conocieron a través del videojuego en línea Fortnite, que permite la comunicación directa entre usuarios mediante chat de voz o texto.
Según ha informado EFE citando fuentes policiales, Eguchi ha confesado haber apuñalado a la menor "en múltiples ocasiones" tras una disputa vinculada al juego. Una autopsia posterior reveló que la víctima presentaba más de diez heridas de arma blanca en la espalda y que falleció por un shock hemorrágico.
La adolescente desapareció el viernes anterior tras informar a su familia de que viajaba a Aichi para visitar a una amiga que, en realidad, era el sospechoso. Al día siguiente, al perder el contacto con ella, sus familiares denunciaron su desaparición. El cadáver fue localizado el lunes y su identidad confirmada al día siguiente.
Una invitación con consecuencias mortales
Eguchi admitió a la Policía que invitó a la menor a su domicilio. Fue allí donde, tras una discusión relacionada con Fortnite, se desencadenó el violento ataque. Aunque de momento ha sido formalmente acusado por abandono de cadáver, las autoridades ya han remitido el caso a la fiscalía y se espera una acusación por asesinato.
La relación entre ambos se fraguó dentro del propio videojuego, que cuenta con millones de jugadores en todo el mundo. Este tipo de plataformas, que integran funcionalidades de comunicación directa entre usuarios, han llamado la atención de las fuerzas de seguridad por su capacidad para facilitar el contacto entre desconocidos, incluidos adultos y menores.
La Policía japonesa ha advertido en varias ocasiones a los jóvenes sobre el riesgo de quedar con personas conocidas únicamente por internet y ha señalado que tanto las redes sociales como los videojuegos con funciones de chat pueden ser utilizados por delincuentes para captar a menores.

