
"A subasta. Oportunidad única de adquirir una piedra auténtica del Acueducto de Segovia". Con este mensaje publicado en sus redes sociales, un vecino de Segovia anunciaba que ponía a la venta un bloque de granito que, según aseguraba, formaba parte de uno de los últimos arcos del emblemático monumento. Por 1000 euros, el individuo pretendía vender el pedrusco.
La piedra, de más de 17 kilos, fue recogida de la zona cercana a la plaza de Avendaño, donde el Acueducto entra en una propiedad privada y el muro contiene materiales de argamasa junto con piedras más pequeñas que las del tramo central. El vecino alegó que el sillar estaba suelto y no informó a ninguna autoridad antes de llevárselo a casa.
El curioso anuncio no pasó desapercibido. Tras difundirse la publicación en redes, las autoridades municipales actuaron con rapidez. Fuentes del Ayuntamiento –citadas por Europa Press–aseguran que, tras saltar la alarma por la apropiación de bienes del patrimonio histórico, el vecino entregó la piedra voluntariamente.
En la misma publicación, el vecino especificaba que los 1000 euros que pagase el comprador por la piedra se destinarían íntegramente una ONG que escogiese el cliente.
Una protesta contra el Consistorio

Días después, el implicado escribió en sus redes: "El Ayuntamiento ha solicitado la piedra, que es lo que se pretendía", y anunció que la subasta quedaba suspendida.
Según este vecino, se trataba de una protesta contra la "inacción" del Consistorio por no percatarse de la piedra suelta en el monumento.
Por el momento, el asunto ya está en manos judiciales, tras la denuncia presentada por el Área de Patrimonio del consistorio y comunicada a la Junta de Castilla y León, donde los técnicos analizan la posible irregularidad cometida.
¿Estaba suelta o fue arrancada?
Desde el ayuntamiento defienden que la pieza habría sido arrancada por el vecino que realizó la subasta, ya que saben dónde va cada piedra porque tienen registro fotográfico de cada una de ellas.
Además, le recriminan al acusado que si —como afirma— había detectado el deterioro del muro no lo comunicara al consistorio, en lugar de llevarse una parte y venderla por internet. Por tanto, anuncian medidas contra el presunto infractor y recuerdan que patrimonio seguirá siendo vigilado y protegido.

