
El acusado ha aceptado una condena de prisión permanente revisable tras reconocer en el juicio que asesinó el 30 de julio de 2024 a su compañero de piso, que se encontraba en silla de ruedas, en una vivienda del distrito madrileño de Villa de Vallecas.
La vista oral comenzó con la selección del jurado popular encargado de examinar los hechos. En ese momento, el procesado confirmó su intención de asumir la pena solicitada por la Fiscalía, que reclama prisión permanente revisable por un delito de asesinato. La acusación pública aplica la agravante del artículo 140.1.1ª del Código Penal al apreciar especial vulnerabilidad en la víctima. El acuerdo de conformidad supone que el acusado acepta esta calificación.
El caso quedó marcado desde el inicio por la entrega voluntaria del procesado. Tras el suceso, acudió a una comisaría del Puente de Vallecas, donde comunicó a los agentes que había acabado con la vida de la persona con la que convivía. La Policía confirmó posteriormente el fallecimiento en el domicilio y procedió a su detención. Desde el 1 de agosto de 2024, el acusado permanece en prisión provisional.
Los hechos
Según el escrito de acusación de la Fiscalía, el procesado convivía con la víctima desde 2023. La mañana del 30 de julio de 2024, y en el transcurso de una pelea relacionada con la vivienda, presuntamente atacó de forma súbita a su compañero de piso. La víctima se encontraba sentada en una silla de ruedas debido a una lesión medular y no pudo defenderse.
La Fiscalía detalla que el acusado utilizó un cuchillo de cocina para asestar múltiples puñaladas. Las heridas afectaron a zonas cervicales, torácicas y abdominales. Estas lesiones le provocaron un shock hemorrágico, que derivó en el fallecimiento casi inmediato de la víctima en el interior de la vivienda.
Horas después, el procesado se presentó por iniciativa propia ante la Policía Nacional. Esta actuación llevó a la Fiscalía a reconocer la atenuante de confesión en su calificación, si bien mantiene la petición de prisión permanente revisable por el asesinato con alevosía.
Además, solicita diversas indemnizaciones en concepto de responsabilidad civil. Los dos hijos menores de la víctima recibirían más de 98.000 euros cada uno. La misma cuantía está prevista para su esposa, mientras que la hermana del fallecido tendría reconocida una compensación de 16.500 euros. Estas cantidades se justifican por el perjuicio derivado de la muerte y por la situación familiar de la víctima.


