
Un mail ha salido estos días de la Generalidad Valenciana que preside el socialista Ximo Puig. Un correo de la Consejería de Sanidad en el que se anuncia a todos los profesionales sanitarios que "el Programa de prevención de cáncer de mama no dispone de suficiente personal facultativo para la lectura de las mamografías". Y que, como consecuencia de esa falta de medios "no habrá segundas lecturas a partir del 1 de marzo de 2023. […] De forma coyuntural, desde el programa se emitirán los informes en los que conste la primera lectura como "normal", es decir, que no se precise de pruebas adicionales". Mientras, el PSOE del mismo Ximo Puig monta manifestaciones contra la sanidad madrileña de Isabel Díaz Ayuso.

El mail relata lo siguiente: "Actualmente, el Programa de prevención de cáncer de mama no dispone de suficiente personal facultativo para la lectura de las mamografías. Con objeto de reducir al máximo el impacto que esta circunstancia coyuntural pueda tener en el mismo, a partir del 1 de marzo de 2023 se van a adoptar las siguientes medidas". Y las medidas suponen literalmente dejar sin "segunda lectura" las pruebas de detección del cáncer de mama. La explicación del área de sanidad del Gobierno de Ximo Puig incluye este redactado: "Se va a priorizar que el personal facultativo que participa en el programa realice las primeras lecturas. No habrá segundas lecturas a partir del 1 de marzo de 2023. Las segundas lecturas se reiniciarán cuando existan facultativos suficientes para completar las primeras". Se acabó por ahora la segunda lectura en la detección del cáncer de mama. El correo añade que "de forma coyuntural, desde el programa se emitirán los informes en los que conste la primera lectura como "normal", es decir, que no se precise de pruebas adicionales. Estos informes irán firmados por el director/a del centro de salud pública". Y arreglado. Todo pasa a ser "normal" aunque no haya segunda lectura.
"Las remuneraciones de la actividad realizada fuera de la jornada ordinaria hasta la publicación del Acuerdo de regulación del Programa especial de productividad para la prestación de módulos adicionales de refuerzo, se realizan con el acuerdo vigente, es decir, mediante el programa de sesiones especiales (se recuerda que en ningún caso la publicación del nuevo Acuerdo puede tener carácter retroactivo sobre la lectura realizada con anterioridad a dicha publicación)", aclara a efectos internos el correo de Sanidad del Gobierno socialista, de Compromís y de Podemos que encabeza Ximo Puig. "Os comunicaremos en breve los detalles de los nuevos módulos de productividad. Un saludo".
Mientras, todos los partidos de ese Gobierno de Ximo Puig no dejan de alimentar las manifestaciones contra la Sanidad de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid. Es más, tanto el PSOE como las distintas marcas del entorno podemita han votado en contra de unos Presupuestos de la Comunidad de Madrid que incluían mil millones más en inversiones para la sanidad madrileña. El propio sindicato usado para convocar las huelgas en Madrid —algunas de cuyas jornadas han llegado a ser secundadas por 13 personas, literalmente— ha rechazado 55 millones adicionales para la sanidad en las últimas negociaciones mantenidas.

