El presidente de la Generalidad Valenciana, Carlos Mazón, se reúne este lunes con la ministra de Transición Economiza y Reto Demográfico, Teresa Ribera, para solucionar las necesidades hídricas de la región "presentes y futuras". El encuentro llega unos días después de que el gobierno autonómico anunciase las inversiones para renovar y mejorar los sistemas de depuración y suministros de aguas por valor de casi 20 millones de euros en varios municipios valencianos.
Estos actos constatan la "responsabilidad" en esta materia defendida por Carlos Mazón en diferentes ocasiones, que posicionan a la Comunidad Valenciana como la región líder en reutilización "al reciclar el 40% del agua de toda España", y el cumplimiento del compromiso del actual Ejecutivo por ser "un ejemplo de aprovechamiento".
En la reunión, que tendrá lugar en Madrid, el presidente ‘popular’ ofrecerá a Ribera "dialogo y rigor" para poner fin a la deuda hídrica de la Comunidad Valenciana, exigiendo "la solidaridad que ya hemos practicado, reclamando la deuda que se nos debe, y entendiendo que en España el agua es de todos".
En esta línea, Mazón pondrá encima de la mesa "los recortes ideológicos al trasvase Tajo-Segura" en el que existe una deuda de 200 hectómetros cúbicos, una cantidad que en términos económicos equivale a 791 millones de euros de Valor Añadido Bruto (VAB), perdidos por los regantes de la cuenca del Segura. Además, pedirá al Gobierno central las obras de modernización pendientes de ejecutar. Unas infraestructuras necesarias para seguir "reutilizando y siendo sostenibles", especialmente en las provincias de Valencia y Castellón.
Estas demandas se suman a las que el Ejecutivo realizó en diciembre cuando la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV) presentó un informe que apuntaba que de la inversión de 2.264 millones en infraestructuras hídricas para el desarrollo socioeconómico de la región asumido por la Generalidad Valenciana, 1.186 millones son responsabilidad del Estado.
Mejora de instalaciones
Durante las próximas semanas se producirá la firma del convenio para la renovación de la red de saneamiento y depuración de aguas residuales de Benidorm, con una inversión de 14,5 millones de euros, la mayor inversión en materia de depuración de aguas en la Marina Baja en las últimas décadas. Esta mejora pondrá fin a las deficiencias por obsolescencia que presenta el municipio en la actualidad y serán financiadas en un 90% por la Generalidad.
Entre las actuaciones que se contemplan cabe destacar la reforma de las instalaciones eléctricas de las estaciones de bombeos, la reparación de la estación de bombeo del Parque de Elche y la mejora de la línea de tratamiento de agua antigua.
Con 4,5 millones de euros, se llevará a cabo la renovación del sistema de suministro en en Canet lo Roig, La Jana y Traiguera, en la comarca del Baix Maestrat, pendiente de licitación. El agua que será extraída del futuro pozo se bombeará con energía limpia "gracias a una planta solar formada por 960 módulos, que será canalizado a su vez por una nueva red de distribución que reaprovechará infraestructuras existentes.