
El presidente de la Generalidad, Carlos Mazón, ha propuesto abrir un debate a nivel estatal sobre la posibilidad de una financiación autonómica "incentivada" en la que las comunidades tengan más margen de gestión de los impuestos indirectos para, a partir de ahí, "ensanchar la caja común" de la que se nutre el sistema, siempre de manera acordada entre todos los territorios y cumpliendo con un mínimo de recaudación.
El también líder del PPCV ha lanzado esta propuesta de "incentivos fiscales" tras volver a criticar la financiación singular para Cataluña que plantea el Gobierno. Su idea consiste en "dar margen" a los gobiernos autonómicos para "flexibilizar" sus competencias en los impuestos indirectos y así lograr "un excedente que beneficie a todos".
"Siempre y cuando se cubran mínimos, sea multilateral y afecte en positivo. Hay un mínimo común que todos tenemos que aportar y tiene que seguir siendo progresivo. A partir de ahí, si somos capaces de generar excedentes podemos jugar a incentivar. Hablo de incentivar en beneficio de todos y con acuerdo de todos, no en mesas aparte", ha manifestado en un foro informativo organizado por el diario El Mundo en Valencia.
Durante su intervención, preguntado por si aboga por una mayor autonomía fiscal, Mazón ha explicado que quiere que a todas las comunidades les "vaya mejor" en función de la "especificidad" de cada una. Por contra, ha lamentado que la financiación sea como una "manta" en la que "si tapas a Cataluña destapas los pies a las demás comunidades". "No se trata de repartir lo poco que tenemos entre unos mejor y otros peor: tenemos que abrir una reflexión para, entre todos, hacer la manta más grande para todos, hacer más grande el pastel", ha ilustrado, y ha lamentado que la Comunidad sea una comunidad "aportadora neta" cuando es la peor financiada.
Además, ha destacado que durante el primer trimestre de 2024 se ha recaudado más "después de haber suprimido el impuesto de sucesiones y donaciones". "Se está generando más actividad que nunca y estamos recaudando más. A ver si con políticas fiscales propias podemos salir todos beneficiados y en vez de primar altos impuestos primamos la competitividad territorial y el beneficio para todos", ha argumentado.
A la cola de la financiación
Sobre la financiación singular para Cataluña, Mazón ha vuelto a criticar que supone un "chantaje" cuando ha subrayado que esta comunidad "ya tiene una financiación singular de facto" --en alusión a los fondos pactados entre el Govern y el Gobierno durante la etapa de Zapatero-- y ha recordado que la Comunidad comparte el "triste honor" con Murcia de estar a la cola de la financiación desde 2009.
"Aunque parezca mentira, aún podemos estar peor", ha señalado, y ha cargado contra el PSPV, el PSC y el "sanchismo" por "seguir defendiendo" esa financiación singular mientras según él están "en contra" las federaciones socialistas de Aragón, Extremadura, Asturias y Castilla-La Mancha. Es más, ha asegurado que "el PSOE español, el de Moncloa, el catalán y el valenciano han renunciado defender la progresividad y la solidaridad" y a "los principios básicos del socialismo".
En cuanto a la futura relación que podría tener con el líder del PSC, Salvador Illa, si llega a presidir Cataluña, ha indicado que será 'president' "si Pedro Sánchez lo permite" y que espera que "al menos no proclame el independentismo" y que cuando la visite la Comunitat le avise y no haga "como Pere Aragonès".
Rechazo a la condonación de la deuda
Por otro lado, Mazón ha vuelto a exigir un fondo transitorio para la Comunidad Valenciana y ha rechazado la condonación de la deuda si se plantea como una "operación solo para Cataluña" y no va acompañada del cambio de la financiación. "Es como si a un enfermo de cáncer le das un ibuprofeno: una tirita", ha señalado, y ha instado a abordar la condonación "desde un mínimo" para que la Comunidad pueda salir a los mercados a financiarse.
Respecto a la propuesta de la Generalidad para reformar la financiación, ha abogado por que la población sea la "clave" del nuevo sistema y ha subrayado que este plantemiento está acreditado "con rigor y sin caprichos nacionalistas ni ventajismos". "Parece que los barones estemos peleándonos por dinero y esto va de sanidad, servicios sociales y educación", ha recalcado, rechazando entrar en "una pelea de egos".


