Puyol, majo, ¿cómo es que te llamas Puyol siendo así que en legítimo catalán deberías apellidarte Pujol? ¡Trampa, trampa!
Corre y ve al juzgado más cercano y solicita el cambio. Tus amigos catalanistas te lo van a agradecer y, a lo mejor, es más tranquilo para ti.
Pues ya sabes lo que hay que hacer...
Intentar ganarla, aunque no te lo van a poner fácil...